Los tres aspirantes del II distrito tuvieron un debate. (Grillo porteño)
Los tres aspirantes del II distrito tuvieron un debate. ante militantes panistas (Grillo porteño)

MÉRIDA.- Se llevó al cabo un encuentro entre los tres precandidatos panistas a diputados por el distrito II local con vecinos de la colonia Vicente Solís, en el que lo que más llamó la atención fueron las porras (y grillas) de los aspirantes, por encima de las propuestas.
En efecto, Ramón May Euán, Jonatan Paz y la regidora con licencia Yahayra Centeno se reunieron en el parque principal de la Vicente Solís, con unos 60 militantes del PAN, y cada uno de los tres llevó su porra que se encargaba de generar más gritos (e indirectas) que las otras.
La primera en hacer uso de la palabra fue la edil Yaharya Centeno, quien extremadamente nerviosa habló de las madres solteras, incluso puso de ejemplo a su mamá que fue una de ellas; al estilo Ivonne Ortega se puso a llorar y dijo que trabajará por los adultos mayores y “discapacitados”.
Entre su porra se encontraban varios empleados del ayuntamiento, como Daniel Salamanca y Juan Gabriel Pacheco Uc, quienes gritaron lo más que podrían por Yahayra, y no es para menos si gracias a ella obtuvieron empleo en el Ayuntamiento de Mérida.
También estaba toda la familia de la edil, evidentemente su mamá, su hermana Mirna (también empleada del Ayuntamiento de Mérida) y parte de su parentela, y el conocido “Patishá”, quien gritó a todo pulmón por Yahayra, pero cuando tocó el turno para hablar de los demás contendientes hizo la grosería de retirarse.
Por cierto, “Patishá” es papá del candidato a diputado local plurinominal Josué Camargo, perteneciente al fallido grupo de Martín Uicab y Kathia Bolio.
Un liderazgo con el que no cuentan es con su tía Rosa Ceballos Madera, ex dirigente municipal del PAN, quien no se lleva con su sobrina.
La concejala con licencia se jactó de la estrecha amistad que tiene con el alcalde Renán Barrera y ejemplificó como logros del primer edil el Centro Municipal de Atención Nutricional y de Diabetes, el cual fue inaugurado cuando ella ya no estaba en funciones.
Luego de la edil siguió el turno a Jonatan Paz Solís, quien con más seguridad al hablar pidió a la militancia no votar en bloque ni seguir la línea de nadie. Explicó que en un partido democrático no debe haber líneas, en clara referencia a los grupos que se formaron y que piden votar por sus candidatos.
Y aunque habló con más soltura y confianza (no olvidemos que fue candidato a diputado federal por el segundo distrito, en donde perdió en 39 de 40 municipios) no presentó propuestas claras de lo que hará en tres años como diputado; más bien criticó las líneas que hay en el PAN.
Y por último pasó Ramón May Euán, que presentó propuestas concretas de lo que hará si gana primero la interna y luego la externa.
Recordó que fue empleado en el Ayuntamiento de Mérida y del Congreso del Estado, en donde realizó múltiples gestiones a favor de los vecinos del distrito II local; manifestó que, de obtener el triunfo, no abandonará a la militancia; vale la pena mencionar que mientras Ramón hablaba, Yahayra Centeno, junto con sus “operadores” se reían de él.