MÉRIDA.- Por no atenderse a tiempo, un joven vecino de Kinchil murió a consecuencia de un golpe que se dio en la cabeza cuando alimentaba cerdos.
Pese a que tenía molestias, no quiso ir al médico sino hasta que se sintió muy mal y tuvo que ser internado en el Hospital O’Horán, donde falleció.
De acuerdo con lo que informó la Fiscalía General del Estado, el pasado 16 de febrero Manuel
Enrique Pool Canul, de 21 años de edad, estaba alimentando cochinos en su natal Kinchil, y al entrar al chiquero se golpeó fuertemente con uno de los barandales.
Pese a quedar aturdido, continuó realizando sus actividades. En los días subsecuentes continuó presentando molestias, pero no acudió con el médico.
No se atendió sino varios días después, el viernes 20 de febrero, cuando no aguantaba el dolor de cabeza y tuvo que ser internado en el O’Horán, donde le diagnosticaron traumatismo craneoencefálico.
Sin embargo, días falleció a causa de las severas lesiones internas que presentaba en la cabeza.
Identificó el cuerpo María Canul, madre del hoy occiso.
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