MÉRIDA.- Luego que se supo que la Secretaría General de Servicios Administrativos dio a los 128 senadores una bolsa de 35.2 millones de pesos para comprar automóviles y computadoras, ninguno de los tres senadores yucatecos ha dicho que devolvería ese dinero, ya que es insulto para la inmensa mayoría de los mexicanos, debido a que esa cantidad se suma al elevadísimo sueldo y prestaciones de los legisladores.
Además, muchísimos mexicanos se sienten ofendidos porque, a pesar de que los senadores reciben un muy elevado salario, su trabajo perjudica muchas veces al ciudadano, porque hacen leyes que favorecen a sus partidos o amigos, por encima del bien común.

Angélica Araujo Lara (PRI), Rosa Adriana Díaz Lizama (PAN) y Daniel Ávila Ruiz (PAN) son los tres senadores yucatecos que recibieron 250 mil pesos para la adquisición de automóvil y 25 mil pesos para computadora personal; es decir, un total de 275 mil pesos por legislador.

Los senadores se sirven con la cuchara grande mientas millones de mexicanos apenas tiene para comer; pero lo peor es que su trabajo legislativo no se refleja en el bienestar de los ciudadanos, en sus bolsillos y en que tengan un mejor nivel de vida.

Además de su altísimo sueldo y prestaciones, muchos senadores gastan a manos llenas en “viajes de trabajo” al extranjero, giras que muy pocas veces o nunca sirven para algo en beneficio del mexicano.