MOCOCHÁ.- Como una burla y ridículo calificaron los vecinos el festival del Día de Reyes que organizó el alcalde Alejandro Silva Dzul, pues la rosca de reyes no alcanzó a todos y los jueguets para los niños fueron pocos, de modo que rifados los hicieron.

 

El evento se realizó en el anexo del palacio municipal, el miércoles 6 de enero, pero asistió poca gente debido a que muchas personas se enteraron antes del festival que los juguetes que repartiría la Comuna eran “de tres pesos”.

Durante el festival, de manera extraña, la rosca de reyes fue chica, de modo que a los pocos asistente se le dio a u pedazo por medio de un sorteo, es decir que varios se quedaron sin su rosca.

“Fue tan pobre el festival, que el alcalde sólo compró tres bicicletas para rifar y contrató a un payaso para tratar de animar el evento, el cual tardó menos de una hora. Los niños se retiraron desanimados y sorprendidos por la pobreza de la Comuna, porque en años anteriores se daban mejores juguetes”, indicó uno de los entrevistados.