MÉRIDA.- Hoy se cumple un año de que estalló la huelga en la Universidad Autónoma de Yucatán, 16 días después de que tomó protesta el rector José de Jesús Williams.

El 16 de enero del 2015 los integrantes de la Asociación Única de Trabajadores Administrativos y Manuales de la Uady decidieron colocar las banderas rojinegras en todas las facultades, escuelas e instituciones de la máxima casa de estudios.

El motivo fue porque la rectoría se negó a otorgarles un incremento salarial del 10%, lo que originó que los 722 miembros del sindicato se levantarán en huelga, que afectó a unos 23 mil estudiantes.

Este paro perjudicó a los alumnos porque se retrasaron en su plan de estudios, otros que estaban a punto de titularse o recibir su cédula profesional no pudieron concluir este trámite en tiempo y forma.

Como remedio para que los universitarios no pierdan tantas clases, el rector decidió que tomaran clases en sedes alternas; en todo momento tanto Williams como la secretaria general de la Autamuady, Sofía Ayil Sierra, culparon al gobierno federal de no aumentar el presupuesto a la Universidad para que pueda concretarse el alza salarial.

Sin embargo, el 9 de febrero del 2015 el sindicato levantó las banderas rojinegras luego de haber llegado a un acuerdo con rectoría, de modo que todo volvió a la normalidad, como hasta la fecha.

Esa huelga fue histórica y simbólica, porque se realizaron muchos foros en donde se discutieron tanto los derechos de los alumnos a estudiar como los derechos laborales del personal sindicalizado que aspiraba a un mejor ingreso.

A raíz de esa interrupción de labores el rector Williams tuvo el tino de declarar que “ni él sabe cuánto gana”, frase que todavía se recuerda.