MÉRIDA.- En 2012, Eloína Martínez Puc, cuando era subgerente de administración de Liconsa, fue suspendida de su cargo durante 15 días por la Función Pública, debido a que se apropió indebidamente de 20 mil pesos producto de la venta de leche, cantidad que devolvió.

De acuerdo con datos recabados, Eloína, actual jefe de cobranza de la Tesorería de la Comuna de la ciudad y acusada de robar dinero de contribuyentes, en el año antes mencionado, una empleada llegó tarde a entregar dinero producto de la venta, pero en la caja no le aceptaron el dinero, porque todavía había que contarlo y ya era hora de salida.

El dinero, unos 100 mil pesos, se le entregó a Eloína, quien al día siguiente se lo dio a la cajera, pero faltaron 20 mil pesos que pagaron en la lechería conocida como la CROC Kanasín; le echaron la culpa a la cobrataria, quien se defendió y puso su denuncia y se inició la investigación.

A final de cuentas se descubrió que Eloína se quedó con los 20 mil pesos y se le obligó a devolverlos, además de que se le suspendió de sus funciones.

Como el Grillo ha publicado, en su trabajo en la Tesorería municipal Eloína ha sido acusada de clonar folios de tickets de tianguistas y puesteros de mercados, a fin de quedarse con el dinero, el cual recaudan Fernely  Sáenz y Ricardo Martín, sub alternos de la jefa de Cobranza, que es Eloína.

Miguel Borges descubrió el robo que hacían Fernely y  Ricardo, de mod que lo documentó y entregó pruebas a Eloína, pero como ella era la “cabeza” de esta pequeña mafia, destruyó las pruebas y dejó sin castigo a sus cómplices.

Por supuestos actos de corrupción, esta semana despidieron a Gabriel Moreno, jefe del mercado San Benito, mientras que Eloína y sus cómplices siguen en su cargos, lo que enojó a muchos empleados que saben de las corruptelas de Eloína, Fernely y Ricardo, de modo que se preguntan que espera el alcalde Mauricio Vila Dosal para acabar con la corrupción de la Tesorería.