MORELIA.- El cardenal Alberto Suárez Inda, y designó a Carlos Garfias Merlos como nuevo arzobispo de esa ciudad; Suárez Inda dijo estar contento por la sucesión, aunque reconoció que a lo largo de su ministerio se presentaron “momentos difíciles” en los que sintió impotencia ante los desafíos que se presentaron.

La noticia fue publicada en L’Osservatore Romano, donde se argumentó que la renuncia presentada con anterioridad por Suárez Inda está fundamentada por el canon 401 & 1 del Código del Derecho Canónico, el cual señala que el obispo diocesano que haya cumplido los 75 años debe presentar su renuncia al Sumo Pontífice.

En un mensaje difundido por la Arquidiócesis de Morelia, Alberto Suárez Inda pidió perdón por los errores y pecados de omisión que cometió, así como por no haber apoyado de manera oportuna a los sacerdotes a su cargo. Indicó que quedan pendientes a largo y corto plazos, pero corresponderá a su sucesor “tomar el timón de la nave, discernir y decidir con sus colaboradores los pasos siguientes, marcar el ritmo y dar impulso a una acción de conjunto”.

“Confieso que no ha sido fácil este servicio que Dios me ha pedido. He pasado momentos muy difíciles, he experimentado impotencia ante los problemas y desafíos. Estoy consciente de que he cometido errores y pecados de omisión; que no he sabido ayudar y acompañar de manera más oportuna y eficaz a los sacerdotes”, destacó.

Carlos Garfias Merlos, quien hasta ahora se había desempeñado como arzobispo de Acapulco, fue designado el nuevo arzobispo de Morelia; al igual que Suárez Inda, también ha denunciado la violencia que afecta a Guerrero; su línea pastoral se ha enfocado a implementar acciones para la construcción de la paz como es acercamiento con los jóvenes, acompañamiento y atención a las víctimas de la violencia e impulsar el diálogo social.

Garfias Merlos estudió Humanidades, Filosofía y Teología en el seminario de Morelia; fue ordenado sacerdote el 23 de noviembre de 1975 para la Arquidiócesis de ese estado.

EL UNIVERSAL.-