CIUDAD DE MÉXICO.- La depresión es un padecimiento que debe ser atendido con esmero y puede desarrollarse en niños o adultos sin distinción, señaló la coordinadora estatal de las Unidades de Especialidades Médicas (Uneme) Salud Mental en Baja California Sur, Martha Diego González.

La especialista indicó que la depresión es un trastorno que afecta el estado de ánimo de las personas, tiene diferentes niveles, profundidades o duración dependiendo del evento que la provoque.

Si es un evento catastrófico, como un accidente o una muerte inesperada, obviamente será más fuerte y por tanto tardará más en ser asimilada y superada.

“Una persona puede desarrollar depresión ocasionada por un ambiente violento, un ambiente de desapego o abandono, al cual poco a poco el sujeto se va adaptando con la posibilidad de que desarrolle gradualmente este trastorno”, comentó.

De acuerdo a la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10) que indica cuáles son los incidencias diagnosticables, los episodios depresivos son más frecuentes y son aquellos que se presentan, por ejemplo, al tener un mal día, una frustración laboral o una carencia económica y que pueda generar un desánimo leve, moderado o hasta grave, señaló la especialista.

En contraste, el trastorno depresivo se presenta cuando hay un sentimiento más fuerte, una emoción más profunda en la persona, como por ejemplo la pérdida de una mascota para un niño que nadie le dio importancia.

Genera en el chico una emoción negativa que evoluciona a tristeza, sube de intensidad y lo convierte en persona depresiva, registra cambios de conducta por esa emoción que no se trató en forma adecuada.

El tener episodios de depresión es natural comentó la psicóloga, “es parte de la vida diaria, nadie puede ser feliz las 24 horas del día, hay momentos que son pasajeros”.

Debe ser preocupante y motivo para buscar ayuda profesional cuando manifestaciones sensibles en demasía, como es llorar por cualquier cosa, dejar de comer o comer en exceso, presentar mal humor permanente o actitud beligerante sin la menor provocación.

“Los síntomas para detectar a una persona con depresión, regularmente son personas con pérdida o aumento de apetito, dolores de cabeza, gente que duerme todo el día o que está muy distraída”, explicó Diego González.

La coordinadora estatal de Uneme Salud Mental enfatizó que la depresión no es exclusiva de un grupo específico de edad, puede afectar a cualquier persona desde un niño hasta un adulto.

Además subrayó que no todas las depresiones deben tratarse con medicamentos antidepresivos, hay casos como los episodios depresivos en los que debe identificarse el origen para favorecer en el paciente su capacidad de control.

El uso de fármacos debe reservarse para situaciones de crisis que impliquen un riesgo para la vida del paciente, su salud o la de su familia.

En la Uneme Salud Mental, dijo, se brindan consultas clínicas donde se puede trabajar los episodios y los trastornos depresivos.

INFORMADOR.-