PROGRESO.- Suman al menos ocho robos en casas y departamentos del oriente de esta ciudad, y los afectados son turistas canadienses, quienes pasan la vacaciones de invierno desde noviembre del 2016 en el puerto. Los hurtos se realizan sin importar que los habitantes se encuentren en su casa.

Los hechos se han denunciado a las autoridades, pero poco se ha hecho para frenar la ola robos, ya que la vigilancia policiaca solo duró unos días después de las denuncias. Se teme que por estos actos los turistas afectados vuelvan a su país y no regresen.

Veladores de casas y encargados de condominios denuncian públicamente que los canadienses que desde noviembre de 2016 pasan el invierno en el puerto son víctimas de una ola de robos en la zona veraniega del oriente de la ciudad.

Destacan que los hurtos se cometen incluso con los extranjeros en las casas o departamentos que rentan a la orilla de la playa.

Encargados de condominios visitados por ladrones alertan que se corre el riesgo de que los canadienses anticipen su retorno a su país y no regresen en la próxima temporada invernal.

El más reciente ocurrió el viernes 27 entre las 4 y 5 de la madrugada en un departamento de la calle 21 entre 58 y 60, cerca del malecón, donde una pareja de canadienses despertó al escuchar ruidos y grande fue su sorpresa al ver en la sala a dos sujetos que tomaban bienes de valor y salieron huyendo.

En la calle 21, desde la 40 hasta la 60, residen familias canadienses en casas y departamentos de condominios. En ese mismo rumbo hay un restaurante de extranjeros donde canadienses y estadounidenses van en las tardes, pero también ya fue visitado por los ladrones.

Hace dos semanas, de madrugada, cacos quitaron la cancelería de una ventana y entraron a un departamento del condominio Orcas, en la calle 48 con 21, al oriente del malecón, y se llevaron tres computadoras portátiles.

Cuando los tres canadienses que viven ahí despertaron y fueron a la sala para leer sus correos, no encontraron sus laptops. Avisaron al encargado del condominio y éste, a la Policía, pero no encontraron ninguna pista.

Días después en un predio cerca de Orcas también robaron de madrugada dos televisores de pantalla plana, según las fuentes. Veladores vieron desde las casas pasar a un sujeto alto y fornido con los dos televisores.

Otras casas del oriente de la ciudad ocupadas por canadienses también fueron visitadas por ladrones.
Los veladores de las casas y encargados de condominios comentan que por las noches pasan una persona o parejas a bordo de motos que transitan de manera sospechosa, pero la vigilancia policíaca sólo se intensificó unos días, cuando se reportaron los robos.

Veladores destacan que los canadienses están preocupados por los robos, pues muchos llevan hasta ocho años pasando el invierno en el puerto y nunca les habían robado, pero ahora podrían retornar a Canadá anticipadamente porque sienten que se vive un clima de inseguridad