MÉRIDA.- Tan sólo durante la semana pasada, se contabilizaron 438 casos de conjuntivitis, es decir, uno cada 23 minutos, de modo que el problema se mantiene latente y por tanto seguirá el ausentismo laboral y escolar, porque se recomienda que el paciente no acudir a lugares públicos para evitar contagiar a otros.

La proliferación se debe al contagio, porque personas enfermas salen a la calle, van al trabajo o a la escuela y le pasan la enfermedad a sus compañeros.

“Esto ya es falta de conciencia de los enfermos de conjuntivitis, quienes deberían estar en sus casas para evitar que la enfermedad se propague”, afirmó un médico entrevistado, quien dijo que muchas veces para no faltar al trabajo o a la escuelas, así como a un concierto la persona enferma va a lugares públicos.

Al menos 10 municipios del interior del Estado sufren los estragos de la conjuntivitis, cuyo nuevo brote data de principios de 2015, sin que hasta el momento se tenga un control de esta enfermedad.

Tanto en Mérida, pero sobre todo, en el interior del Estado, las clínicas y hospitales están saturadas ante la proliferación de esta enfermedad, que ya se extendió a numerosos municipios, causando también la saturación de los Servicios, tal el caso de Acanceh, Chumayel, Progreso, Tekax, Ticul, Tizimín, y Valladolid, principalmente.

Hasta ahora no hay vacuna contra esta enfermedad, de modo que lo que los médicos recomiendan a los enfermos evitar contagiar a otros evitando ir a lugares públicos o muy concurridos.

Para tratar de evitar esta enfermedad, que es alérgica o viral, se recomienda alejarse de personas enfermas, no tallarse los ojos y lavarse las manos; los que ya la tienen no deben tallarse los ojos, deben evitar el Sol y no pasar malanoche, entre otros cuidados.