MÉRIDA.- Acabando de salir del penal al ser beneficiado por el Nuevo Sistema de Justicia, Edwin Armando Burgos Dzib abordó un taxi y se dirigió a la casa de la prestamista Ermila Vera Arangua, de 70 años de edad, ubicada en la comisaría de Santa Rita, Cholul, a la que degolló para robarle poco más de 8 mil 500 pesos.

 

La juez de control Blanca Beatriz Bonilla González lo imputó por los delitos de homicidio calificado y robo calificado, que denunciaron los hijos de la ahora occisa.

Decretó contra el imputado la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa por todo el tiempo que dure el proceso.

El 17 de enero se efectuará la audiencia de vinculación.

El taxista que lo llevó al lugar del crimen que se perpetró el 17 de noviembre pasado en la calle 9 entre la 10 y 12 de la colonia Santa Rita en Cholul reveló que lo recogió a las puertas del Centro de Justicia Oral de Mérida y lo trasladó hasta las calles arriba señaladas y que este sujeto olvidó una mochila en su unidad.

Al día siguiente, se enteró por los medios de la muerte de una mujer de avanzada edad, en la dirección donde había dejado a dicho sujeto.

Acudió a la Fiscalía General del Estado para entregar el bulto, donde se encontró unos papeles en los que se indicaba que Burgos Dzib acababa de recibir los beneficios del Nuevo Sistema de Justicia Penal.

Un familiar del individuo vive a media cuadra del lugar del crimen y es por eso que prestaba sus servicios de jardinería en el lugar del crimen.

Los objetos robados fueron valuados en 8,528 pesos.

Lo curioso del caso, es que fue la misma juez de control la que en abril pasado encontró elementos suficientes para vincular a proceso penal a Edwin Armando por el delito de robo calificado.

Le impuso las medidas cautelares de no salir del Estado; acudir a firmar y llevar en el tobillo un dispositivo electrónico.

Ese día, este sujeto se introdujo a un predio del fraccionamiento El Triunfo, de la comisaría Santa Gertrudis Copó, donde habitan los agraviados, y se apoderó de diversos muebles, entre ellos una pantalla de plasma de 32 pulgadas, una alcancía artesanal con 82 pesos, un ventilador de pedestal y una consola de juegos.

Al huir fue retenido por el quejoso, quien lo entregó a la policía.

Irónicamente, el 17 de noviembre pasado, la misma juez, es decir Bonilla González, aprobó suspender el proceso penal por un plazo de 6 meses, durante la celebración de la audiencia intermedia.

Los compromisos adquiridos por el imputado y su defensa fueron residir en un determinado predio, no acercarse a la víctima y su domicilio en un rango de 200 metros, conservar un trabajo, acudir a firmar cada mes y se estableció un plan de reparación del daño por 4 mil 600 pesos que pagaría en abonos mensuales.

Sólo salió y fue a matar a la anciana, que sabía tenía dinero en su casa, porque hacía préstamos.

Este sujeto fue detenido el 19 de noviembre, acusado de asaltar con una pistola al encargado de una tienda en Ciudad Caucel

Junto con otro individuo robó la cantidad de 6 mil pesos.

El juez Luis Edwin Mugarte Guerrero lo imputó y vinculó a proceso por el delito de robo calificado cometido con violencia y como medida cautelar le impuso la prisión preventiva.

Este individuo había promovido amparos, hasta que éstos quedaron sin efecto y se le consignó por el crimen y robo.