GUADALAJARA.- La Fiscalía General de Jalisco detuvo a tres policías municipales de Tecalitlán por su vinculación en la desaparición de tres personas italianos, y que fueron entregados a integrantes de una célula del Cártel de Jalisco Nueva Generación, (CJNG).

Las víctimas, comerciantes de oficio, responden a los nombres de Raffaelle y Antonio Russo, padre e hijo, respectivamente, y Vincenzo Cimmino, sobrino del primero, fueron detenidos el pasado 31 de enero por los policías municipales

Al momento la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SEIDO) fue notificada de la detención de los tres policías, quienes habrían obedecido ordenes de un alto mando de la policía de Tecalitlán, la cual fue intervenida por la Fiscalía Estatal, y que desarmó a los elementos, los cuales se encuentran encuartelados en la Academia de Policía Estatal.

También se informó de la evasión del director de la corporación municipal, Hugo Enrique Martínez Muñiz.

Además, los familiares de los italianos exigieron su localización y se quejaron de que fueron incriminados por las autoridades jaliscienses al dar a conocer sus antecedentes penales.

Raffaelle fue detenido en Ciudad del Carmen, Campeche en 2014, por fraude, ya que vendía maquinaria china con logotipos de Caterpillar;se le procesó también por cohecho, pues ofreció dinero a los policías para evitar su consignación.

Asimismo, autoridades italianas informaron a la Procuraduría General de la República que los desaparecidos pertenecen a un grupo delincuencial, denominado Los Magliari, dedicado a la falsificación y el fraude, además que el mayor de los afectados estuvo preso en Italia durante tres años.

Raffaele Russo, de 60 años de edad, tenía carta de residencia en México y viajó a Tecalitlán por negocios, pero ya no se reportó con su hijo Antonio, de 25, y su sobrino Vincenzo Cimmino, de 29 años, quienes fueron a buscarlo, pero los policías los interceptaron en una gasolinera, y enviaron mensajes a sus parientes para señalar que se les estaba deteniendo.

Después ya no se supo nada de ellos.