MÉRIDA.- Para promover el crecimiento económico mediante la creación, consolidación, productividad, competitividad y sustentabilidad de empresas del sector de tecnologías de información y servicios relacionados, desde 2013 el Programa para el Desarrollo de la Industria del Software (Prosoft) ha invertido más de 226 millones de pesos para impulsar 109 proyectos.

 

Con este esquema, operado a través de la Secretaría de Fomento Económico (Sefoe) y que detona un ramo estratégico que contribuye generar ecosistemas de innovación, los emprendedores del rubro se han visto favorecidos 15 veces más que en el periodo de 2008 a 2010, cuando se erogaron únicamente 14.7 millones para beneficiar a 31 propuestas.

De 2013 a la actualidad, las autoridades estatales han aportado casi 56 millones de pesos, la federación una cantidad igual, mientras que la iniciativa privada ha hecho lo propio con 114 millones, con lo que se ha generado mil 183 empleos y mejorado 610 más.

El apoyo mediante subsidios, que ofrece la actual gestión de Gobierno, obedece a que se trata de uno de los sectores estratégicos de alto valor no sólo de la entidad, sino del país, como parte de una política de que contempla el diseño y avance de una agenda regional, e incluye el impulso de capital humano innovador y la promoción de cadenas de valor.

Entre las ideas respaldadas por Prosoft destaca una de medicina genómica para la detección de enfermedades a bajo costo de la firma Bibliotecas Genómicas (Essenx, por su nombre comercial), una herramienta para detectar tempranamente la diabetes mellitus tipo 2 y el síndrome metabólico, para disminuir las consecuencias ocasionadas por estos padecimientos y mejorar la calidad de vida de los pacientes.

Desde su fundación en 2013, Essenx se encarga de desarrollar alta tecnología que permita monitorear la salud a partir de un enfoque genómico, como un plan que complementa a la clínica tradicional. Con lo recibido, la compañía comenzó el proyecto denominado “Herramienta de detección temprana de anomalías metabólicas relacionadas con síndrome metabólico (SM) y diabetes mellitus tipo 2 (DMT2) en la península de Yucatán”.

Lo anterior surgió como una línea de negocio de otro producto, un microarreglo que mide el perfil genético y grado de severidad de una persona con las afecciones mencionadas y la intención es ofrecer a la población un instrumento accesible para detectarlas.

Apuesta a la innovación

La apuesta a la innovación, es clave para el desarrollo de la entidad, por ello, en la segunda mitad de 2017, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y la National Science Foundation (NSF), en respuesta al interés de la Secretaría de Investigación Innovación y Educación Superior de Yucatán (SIIES) y de la Delegación Regional Sureste del Conacyt, emitieron una convocatoria para concursar con propuestas de integración de nuevos Nodos Binacionales de Innovación.

Los Nodos trabajan juntos para desarrollar, aprovechar y sostener un programa nacional de innovación que mejore la creación y explotación de tecnologías que beneficien a la sociedad. Su función principal es capacitar al personal científico en temas de innovación tecnológica, tomando como punto de partida el plan de estudios utilizado en Estados Unidos de América para apoyar a los equipos I-Corps de la NSF, además de vincularse con los Nodos autorizados en el vecino país de norte que cuentan con financiamiento y supervisión de la NSF.

El Nodo Binacional de Innovación (NoBI) del Sureste está integrado por diez instituciones científico-académicas de los estados de Yucatán, Campeche, Quintana Roo y Chiapas, las cuales son el Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C. (CICY), líder del NoBI Sureste; el Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco, A.C. (Ciatej) y el Centro de Investigación en Matemáticas, A.C. (Cimat).

Asimismo, el Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), la Universidad de Quintana Roo (UQRoo), la Universidad Anáhuac Mayab, el Tecnológico Nacional de México, el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) Unidad Mérida y el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).

Estos organismos trabajarán de forma coordinada como nodo y su labor es desempeñarse como líderes regionales en el desarrollo de herramientas y recursos que impacten y expandan los beneficios de la innovación y el emprendimiento de base tecnológica, con particular énfasis en la formación de capacidades de personal científico en temas de innovación tecnológica.

Hoy, el NoBI Sureste se suma a los cinco nodos de Innovación ya existentes en el país: NoBI Universitari, NoBI Bajío, NoBI Norte, NoBI Salud y NoBI MAP (Manufactura Avanzada y Procesos).

La expectativa es que, con la integración del NoBI Sureste, en el primer año se formen capacidades en al menos 23 equipos de trabajo que permitan acelerar de manera efectiva la comercialización de la investigación básica y aplicada que actualmente se desarrolla en las instituciones de la región.

De esta forma, se determinará el potencial y alcance de cada uno de los proyectos presentados por los equipos y se trabajará en conjunto para establecer la mejor estrategia de transferencia tecnológica, mediante la oferta de servicios tecnológicos, el licenciamiento de propiedad intelectual o la creación de empresas de base tecnológica. Con estas estrategias se podrá apoyar a cada equipo de trabajo a identificar el fondo más adecuado que le permita dar el siguiente paso hacia la comercialización.

El NoBI Sureste aprenderá de la experiencia que la NSF ha adquirido al llevar a cabo el programa denominado Innovation Corps (ICorps), el cual se implementa en Estados Unidos desde el 2012 y tiene como objetivo principal fomentar el espíritu empresarial que ayude a la comercialización de las tecnologías que se han desarrollado en los centros educativos.

El NoBI Sureste tendrá un impacto en al menos 69 personas de los tres estados del sureste del país, a través de los 23 equipos que serán conformados por un investigador principal, un mentor de negocios proveniente de la industria y un líder emprendedor estudiante de pregrado o posgrado, lo cual acercará a la industria y la academia, para detonar nuevos proyectos de investigación y desarrollo tecnológico en conjunto.

Con estas actividades, NoBI Sureste, no sólo ayudará a acelerar el uso de la investigación básica y aplicada, sino que apoyará en una nueva formación de jóvenes investigadores con una visión empresarial para que los nuevos proyectos de investigación y desarrollo tecnológico tengan un enfoque más allegado al mercado y contribuyan a generar tecnologías que resuelvan los grandes problemas nacionales que enfrentan los diferentes sectores empresariales.

Con la difusión y divulgación de las actividades y los resultados generados a través de la página web y las redes sociales, se motivará a más investigadores a que conviertan sus invenciones en productos, procesos o servicios que puedan ser adoptadas por la industria. De esta manera, el Gobierno del Estado de Yucatán y el Conacyt cumplen con su función de garantizar que la ciencia y tecnología generada en la región contribuya al desarrollo económico y social de México.