MÉRIDA.- Sólo uno ha vencido a la muerte natural, pero en estas campañas varios aspiran vencer a la muerte política y resucitar y otros de plano se quedarán en el limbo y habrán hecho debut y despedida, mientras que otros serán unos abortos políticos.

José Antonio Meade, candidato presidencial del PRI aspira a resucitar, pero sólo Jesucristo en persona lo podría resucitar, como hizo con Lázaro a quien le dijo “Levántate y camina”. No creo que haya fuerza humana poderosa para hacerlo levantarse y caminar…. No creo que se repita el caso del Estado de México, en donde el candidato del Mazo se levantó del tercer lugar y ganó la elección de gobernador.

En plena celebración de la Resurrección de Jesús, el grueso de las decenas de candidatos a alcaldes, diputados locales y federales, senadores y a gobernador comenzó la larguísima campaña, más larga como la Cuaresma que acaba de terminar.

Mientras en los puertos la gente, ganas de pasar apuros gratis, hacía largas filas para comprar cervezas, tortillas, pescado frito y otras cosas, en Progreso se concentraron varios candidatos, para tratar de aprovechar a los miles de paseantes, masoquistas les diría, que fueron a la playa y tratar de ganar simpatías.

Respecto a los muertos políticos, no nacidos y suspirantes a resucitar, una tal Paulina Viana,  Francisco Javier Rodríguez Vadillo, Zázhil Méndez Hernández, Filiberto García Herrera, Isabel Febles, Rosalba Centeno, Roberto Tolosa y Noé Pech buscan ser diputados locales del PAN sin más méritos que el llegar a candidato por causa de un buen padrino político y arreglos cupulares.

Bueno el PAN dejó a sus “tigres” fuera y a varios expertos en mamar de la ubre oficial, como la Buctzotzlovaca (Rosa Adriana Díaz Lizama) le dieron otros huesitos: será diputada local pluri y a su hija Ingrid Santos Díaz, una perfecta “X”, la hizo candidata a diputada federal por el Distrito II.

El tricolor no se queda atrás en esto de los muertos políticos, aunque son menos que en el PAN:

Nelson Lara Cabrera, Paola Mujica Quiroz, Linette Escoffie Ramírez, Marcos Rodríguez Ruz, Mirthea Arjona Martín y María Moisés Escalante.

De MORENA ni qué decir, mejor ni nombramos a alguno porque todos son “unborn”, no nacidos políticamente.

Claro alguno de estos “ilustres desconocidos” tendrá que ganar, aunque si yo fuera juez los descalifico y designo a gente más preparada, capaz y con experiencia en el servicio público y el área legislativa.

Cada distrito de los XV locales recibirá durante casi 90 días a estos politiquillos, de los cuales si los ciudadanos tienen suerte alguna vez volverán a ver al que gane, mientras que de los otros no volverán a saber nada de ellos en años. A menos que salgan en notas policiacas y entonces sí se harían famosos.

De los candidatos a diputados federales hablaremos en otra nota, junto con suspirantes a senadores.