MÉRIDA (ACOM).- Investigadores, docentes y especialistas de la cultura mostraron su pesar y consternación por el deceso del arqueólogo alemán Peter Joahannes Schmidt (1940-2018). Schmidh dedicó más de cuatro décadas al estudio de los mayas y fue responsable del Proyecto Arqueológico de Chichén Itzá.

Tras conocerse la noticia de tan lamentable perdida, investigadores, especialistas de muy diversas disciplinas de Yucatán mostraron a través de redes sociales su pesar por este hecho. Incluso el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) publicó en su página un comunicado sobre la desaparición física de este estudioso mayista.

Ganador de importantes premios y reconocimientos internacionales, Peter Schmidt publicó numerosas obras editoriales, publicaciones científicas y aportaciones a la investigación de la milenaria cultura maya, entre otros reconocimientos: en 2014, la Medalla UNESCO de la Diversidad Cultural, por sus aportaciones en materia de conservación y conocimiento del patrimonio histórico de Yucatán, en 2015 la Medalla “Yuri Knórosov”, entre muchas otras.

Originario de Hamburgo, Peter Schmidt egresó de la Universidad de Hamburgo, Alemania, en 1967. Cursó estudios de Antropología General, Lingüística, Prehistoria y Estudios Americanistas, donde fue alumno del etnólogo e historiador Franz Termer, el arqueólogo Wolfgang Haberland y el experto en escritura maya Günter Zimmermann.

Entre 1959 y 1960 realizó excavaciones en su natal Alemania, posteriormente trabajó como ayudante de investigación en el Museo de Antropología y Prehistoria de Hamburgo. Entre 1961 y 1963 hizo excavaciones en Centroamérica, especialmente en la Isla de Ometepe, Nicaragua, labor con la que estableció una secuencia cronológica para la región.

En 1968 obtuvo el doctorado en filosofía de la Universidad de Hamburgo y su tesis doctoral versó sobre “Las costumbres funerarias de los indígenas del sur de Centroamérica: una investigación etnoarqueológica”.

Llegó a México en 1973 y trabajó como director del Proyecto Huejotzingo, dentro del programa conjunto Puebla-Tlaxcala, a cargo del INAH y con la colaboración de la Fundación Alemana para la Investigación Científica, con el que llevó a cabo trabajos de campo para establecer el patrón de asentamiento en las diferentes épocas de ocupación del área.

En 1977 ingresó al INAH como investigador del entonces Centro Regional del Sureste, hoy Centro INAH Yucatán, donde estuvo adscrito hasta su muerte. Realizó trabajos de campo en los sitios arqueológicos de Chichén Itzá, Yucatán; El Meco y Kohunlich, en Quintana Roo, entre 1976 y 1981. Fundó y dirigió la Ceramoteca del Centro Regional del Sureste del INAH, de 1980 a 1983, y fue director del Museo Regional de Antropología de Yucatán, Palacio Cantón, de 1983 a 1993.

Durante 1979 y 1980 definió y estableció el polígono para proteger y preservar los monumentos arqueológicos de Chichén Itzá, así como la flora y la fauna, que sirvió de base para el decreto presidencial por el que se declaró la Zona de Monumentos Arqueológicos.

En 1993, dirigió el Proyecto de Investigación Arqueológica de Chichén Itzá, con el que estudió la arqueología, arquitectura, iconografía, agricultura, el patrón de asentamiento, materiales, cronología y obras hidráulicas de ese sitio maya.

Fue profesor en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) en la Ciudad de México y en la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán; fue autor de numerosos artículos sobre arqueología mesoamericana y maya, así como y miembro de asociaciones científicas en México, Alemania y Estados Unidos.