MÉRIDA, Yuc., 08/06/18.- Un enfrentamiento con piedras y palos entre vecinos en la colonia Lindavista Obrera, que dejó como saldo a tres mujeres heridas, puso en evidencia un añejo pleito entre familias al salir a la luz pública acusaciones entre ambas partes.

En medios de comunicación, tres mujeres ensangrentadas acusaron a una madre, padre y dos hijas de golpearlas; señalaron a la familia como agresiva e incluso los denunciaron ante el MP.

La versión de la señalada como agresora, Leydi del Toro Solís, es que todo se debe a una deuda que las mujeres que la acusan se niegan a pagar.

Del Toro Solís explicó que sus examigas tenían problemas económicos y para ayudarlas les dio sus propias alhajas para empeñarlas. De manera personal se las entregó a Alejandra Padilla Campos, quien a su vez se las entregó a su madre, Guadalupe Campos Pech, que labora como enfermera en el hospital Juárez, y quien se encargó de hacer los empeños para pagar los gastos de una enfermedad.

Luego de ocho meses de espera y ante la falta de comunicación sobre las alhajas, Leydi decidió hablar con Alejandra, pero esta le dijo que el dinero de sus alhajas se lo dio a su mamá Guadalupe Campos, quien a su vez refirió que se lo gastó con sus otras dos hijas Dioné y Maricela.

Estas viejas rencillas han llevado a estas dos familias a enfrentarse en dos ocasiones estos últimos meses. La primera ocurrió el 30 de marzo de este año, e incluso la familia Padilla Campos denunció por agresión ese mismo día a Leydi del Toro.

El pasado jueves 31 de mayo, su pleito fue documentado por medios de comunicación.

Ese día Leydi salió a las 8 de la noche para hacer una diligencia, pero al regresar a su casa las tres mujeres la agredieron, por lo que entraron a su rescate hijas Katherine y Evelyn.

También el jueves 31, pero tres horas más tarde, cuando del Toro se dirigía a poner su denuncia ante las autoridades, ambas se volvieron a encontrar a la vuelta de su casa y de nuevo se enfrentaron.

Asegura que ambas forcejeaban una roca y cuando Leydi la soltó, esta golpeó contra el rostro de una de las agresoras, propiciándole una herida y minutos después llegaron al lugar policías estatales de la unidad 1911.

Leydi del Toro dijo que tanto ella como sus dos hijas sufrieron lesiones y hasta hoy tienen dolor de cabeza y cuello, situación que las ha llevado a hacerse estudios y tomarse rayos X.

Tras ser citadas ante la Fiscalía, las hermanas Padilla Campos intentaron atacarla otra vez, por lo cual las autoridades les pidieron que abandonen el lugar debido a sus conductas.

La entrevistada relató que Guadalupe Campos y Alicia Quiñones buscan sacarla de su casa, ya que algunos vecinos le informaron que ambas andan recolectando firmas para su desalojo.

Ante todo este problema, del Toro Solís buscará las medidas necesarias para solucionar el problema, ya que ella afirma no tiene nada que ocultar, e incluso invita a las agresoras a dialogar para llegar a un acuerdo.