Chihuahua.- Los yucatecos Pablo Peraza Cardos y Diego Chávez Ku no pudieron alcanzar el oro en la Olimpiada Nacional, al caer en sus respectivas finales en el Centro de Convenciones de Chihuahua, este lunes.

 

Peraza Cardos se quedó con la medalla de plata pues perdió por decisión unánime ante Francisco Javier Ramos de Jalisco, un púgil que tiene en su haber tres títulos de Olimpiada Nacional y es una de las cartas fuertes de México para los Juegos Olímpicos de la Juventud que se desarrollará en Argentina.

Pese a las credenciales del rival, el yucateco Peraza salió a hacer lo suyo y durante el primer episodio puso en aprietos al rival con golpes a las cosillas para restarle velocidad.

La pelea pactada en los 69 kilos fue fragorosa y el segundo asalto fue del jalisciense, quien comenzó a esperar la entrada de Peraza para conectarle.

En el tercer asalto Peraza emparejó las acciones y Ramos utilizó sus mejores armas, el volado de derecha y el opercut, para bajar la intensidad de su oponente.

Por otro lado, la comisaría de Caucel ya tiene de que enorgullecerse, uno de sus hijos prodigios ganó este lunes la medalla de plata, Diego Chavez Ku, quien cayó  por decisión unánime ante Jesús Romero de Chihuahua.

Chávez, quien era una de las esperanzas de Yucatán de terminar con la sequía de oro en Olimpiada Nacional, -no se gana desde el 2013-, salió en la búsqueda de la presea, pero el rival también cuenta.

El boxeador yucateco, quien salió del gimnasio “El Fénix” fue sorprendido por el chihuahuense en los inicios de la pelea con un volado que obligó la intervención del tercero sobre el cuadrilátero.

En el segundo asalto Chávez intentó tomar el control del combate, sin embargo, Romero, más largo de brazos evito las embestidas del rival y aprovechó para conectarlo en repetidas ocasiones.

El “boxito” buscó hacer daño a la zona hepática, aunque sin mucho éxito.

El tercero fue una copia del primer rollo y aunque Chávez buscó pelear en corto para meter sus mejores golpes, el rival siempre se salió con la suya.

Yucatán regresa a casa con tres medallas, dos de plata y un bronce de René Ortiz, orgullo de Kanasín y dirigido de “Joe” Cerda.