HUNUCMÁ, Yuc., domingo 24/06/18.- José Ernesto U. C.l, vecino de esta villa quedó prensado entre los hierros retorcidos de un auto Nissan, modelo Tsuru tras chocar brutalmente contra la parte trasera de un tráiler, salirse de la carretera, volcar y finalizar en posición normal.

El accidente sucedió poco antes de las 9 horas de ayer sábado, al parecer porque el chófer se durmió,  a la altura del kilómetro 17 de la carretera Mérida-Tetiz, a un costado del paso a desnivel, exactamente del entronque que comunica a la comisaría de Texán Palomeque.

Gracias a la respuesta inmediata de elementos del Cuerpo de Bomberos, que emplearon las “quijadas de la vida”, con apoyo de policías y paramédicos, lograron en tan sólo unos minutos, sacar aún con vida a José Ernesto.

Fue tremendo el choque del Tsuru contra el tráiler, justo en la defensa de fierro, lo que provocó que el viejo vehículo quedara hecho añicos e incluso el panorámico quedó colgado de un árbol, a escasos metros del percance al salir despedido.

El hunucmaense José Ernesto, el cual vive por la colonia San Juan, manejaba el auto compacto, con placas YYS-695B, de oriente a poniente, en dirección a este municipio.

A pesar de que no se supo con exactitud la causa del percance, al parecer se debió a un “pestañazo” de José, cuyo estado de salud se reporta como delicado, ya que terminó prensado entre el tablero, el asiento y la portezuela.

El herido, que sangraba en diferentes partes del cuerpo, principalmente por una herida en la cabeza, fue rescatado por la puerta de atrás, para enseguida ser subido a una camilla y de ahí a la ambulancia de la Cruz Roja para ser llevado en urgencia a un hospital de Mérida.

Comandantes de los Bomberos acudieron también al sitio, para coordinar las labores de rescate. En el lugar, donde se suelen estacionar tráileres, en el área del acotamiento, se concentraron las patrullas 781, 2129 y 866 de la Secretaría de Seguridad Pública.

Al lugar llegaron paramédicos de la ambulancia 21-G, de la SSP, así como agentes de la Policía Municipal, a bordo de las patrullas 1487 y 1488, a cargo del comandante Carlos Canul Suárez.