MÉRIDA, Yuc., miércoles 27/06/18.- Mientras a la selección se le acabó la noche de ensueño y de los corceles que se volvieron contra Alemania, ahora volvieron a ser los ratones verdes de siempre, Merari Sánchez Roca se resigna a su derrota envuelto en escándalos de corrupción y de infidelidades.

El inicio de Merari en la política estuvo marcado por el robo de un teléfono celular y de una computadora al entonces alcalde Manuel Fuentes Alcocer, quien perdonó a este sujeto de manos largas, quien en dos años de regidor de la Comuna meridana hizo mucho dinero con corrupción.

El Grillo ha dado a lo largo de este tiempo los negocios corruptos de Merari, principalmente en la Policía Municipal, coludido con el corrupto Mari Arturo Romero Escalante, director de la corporación.

De usar chancletas sayonara, en la Colonia Obrera, el “poch” fresa de Merari ahora usa zapatas Ferragamo, de 16 mil pesos, y se pasó a vivir al norte de la ciudad, porque buscó una novia de apellido de abolengo, sin dinero la mujer, pero de la “casta divina”.

Como parte de sus corrupciones, Merari puso una oficina en el centro, en donde se ve a directores y subdirectores de la Comuna desfilar semanalmente para arreglar los contratos. Esto molestó a muchos proveedores que solían competir por estos servicios, pero ahora se los dan a Merari, debido a que es regidor y porque a los funcionarios les ofrece un porcentaje si le compran a él. Es muy común ver a sus empleados de oficina cobrando cheques en diferentes dependencias con diferentes tipos de empresas.

Sin embargo, el botín mayor lo tiene en la policía municipal, en donde ha hecho jugosos “negocios” en complicidad con el director, el cual se compró dos ranches en Tekax.

Sin embargo, Merari, designado el edil más flojo de 2016, creyó que para hacer campaña en el Distrito II le bastaba colocar carteleras en el Deportivo del DY y dar cursos de cocina, pero Vida Gómez Herrera le dio una lección de como se hace campaña, caminando calles y con contacto directo con la gente.

Merari en vez de hacer eso se dedicó a serle infiel a su esposa Rebeca Peón, quien se enteró y corrieron a una integrante del equipo de este sujeto, a llorar que competía contra un poderoso equipo y a negarse a invertir para tratar de ganar.

En medio de una desorganización, parte del equipo de Merari se dedicó a otras cosas, como a beber cerveza, lo que dimos a conocer, en horas de hacer campaña.

Hoy miércoles, al finalizar la campaña, la suerte de este sujeto corrupto y flojo está echada y aspirará a ver de que Comuna panista  se colgará para hacer sus corrupciones.