MÉRIDA, Yuc., sábado 7/07/18.- A sus 72 años, Juan Canul fue imputado por el delito de violación equiparada agravada, acusado de ultrajar varias veces a una parientita, a quien a los 12 años la convirtió en su mujer y que a los 14 embarazó.

El juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero le impuso la medida cautelar de prisión preventiva hasta la audiencia de vinculación, que tendrá lugar el  miércoles 11 de julio.

La defensa del inculpado alegó que este sujeto, por contar con 72 años de edad, no puede permanecer en prisión y es necesario que se le declare inimputable.

Mugarte Guerrero consideró no procedente la excepción de la edad, ya que la Fiscalía argumentó no sólo la oficiosidad de la medida cautelar de prisión preventiva, sino que también señaló que esa prerrogativa no debía aplicarse, porque se debe considerar el riesgo social, garantizar la seguridad de la víctima, el interés superior de niñas, niños y adolescentes.

Argumentó que está la doble garantía por el hecho de ser también mujer y su derecho a vivir libre de violencia, además de habitar en el predio contiguo a donde habita la menor.

Este sujeto fue detenido en cumplimiento de una orden de aprehensión.

Los hechos empezaron hace aproximadamente dos años, cuando la menor de edad se fue a vivir a la casa del anciano, bajo el cuidado del mismo, ya que su progenitor y hermanos no la podían cuidar.

A la edad de 12 años, cuando estaba a punto de dormirse, el sujeto se subió en su hamaca, la despojó de sus ropas y le impuso la cópula por la vía vaginal, diciéndole que quería que fuera su esposa y que no hablara.

Por temor y vergüenza, no opuso resistencia, aunque cerca estuvieran durmiendo otras personas.

Los ataques continuaron hasta que a principios de marzo pasado su hermano notó cambios físicos en ella y le pidió a una familiar que la llevara al médico, determinándose que tenía en ese tiempo 24.2 semanas de gestación.

Cuando el progenitor fue informado, no hizo nada al respecto, concretándose a enviarla al domicilio de uno de sus primos.

A los pocos días la menor fue a buscar sus ropas y ahí encontró a su agresor, quien de nueva cuenta la atacó sexualmente.