CIUDAD DE MÉXICO, sábado 08/09/18.- La capacidad de soñar se ve severamente afectada entre mujeres que experimentan depresión clínica y, en caso de soñar, las emociones que experimentan son menores, reveló un estudio del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente.

El estudio arroja que en caso de soñar y experimentar emociones, estas suelen ser negativas, y el contenido de sus sueños suele ser menos detallado. “Además de soñar con menos frecuencia durante una noche, las pacientes deprimidas sueñan con mucho menos detalle, por ejemplo, sueñan una sola imagen, sin acción, sin historia”, dijo la investigadora Ana Paula Rivera García.

En el estudio participaron 12 pacientes con depresión y 12 mujeres sanas. A cada una se les convocó a dos noches de registro para que durmieran en el instituto. Fue en la segunda noche que se llevó a cabo el ensayo al interior de una cámara de sueño, para medir las expresiones del rostro durante el sueño y ser monitoreadas, a fin de detectar las fases de movimiento oculares rápidos, durante los cuales se llevan a cabo los sueños.

Se observó que entre las mujeres con depresión se incrementaba el voltaje del corrugador, músculo para fruncir el ceño, y se disminuía en el cigomático, el músculo de la sonrisa.

En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, la investigadora Rivera García subrayó que las personas sanas suelen experimentar historias cargadas de realismo y emociones durante el sueño. Este impedimento para soñar obedecería a un déficit en la comunicación entre las estructuras de la corteza frontal y regiones límbicas del hemisferio cerebral izquierdo. La conclusión es solo preliminar, por lo que se continuará investigando por qué las mujeres con depresión no consiguen consolidar sus sueños.

Una siguiente fase de la investigación será también aplicada a pacientes en remisión, así como en hombres y pacientes con ansiedad.

CONACYT.-