MÉRIDA, Yucatán, domingo 23/09/18.- Ayer sábado al mediodía ocurrió un espectacular accidente en el fraccionamiento Las Brisas: un autobús literalmente le pasó encima a un automóvil, cuyo conductor se “voló” la señal de alto.

Luego de pasar por encima del auto, al autobús colisionó a otro coche, esquivó uno más y terminó montado en la acera: increíblemente nadie resultó con heridas de consideración.

El conductor de un Dodge Attitude, de color azul cielo y placas H26-ASC de la Ciudad de México, transitaba de Poniente a Oriente sobre la calle 24 y al llegar a la intersección con la 15 no respetó la señal de alto e invadió la arteria con preferencia de paso, por donde se aproximaba de Sur a Norte un autobús Mercedes Benz, de la ruta Itzimná-Mayapán-Polígono 108, con número económico 83 y placas A-3940-Z, conducido por Bernardo Medina Vázquez.

El camionero trató de esquivar al automóvil, pero la llanta delantera izquierda pasó por encima del capirote del coche.

Entonces Medina Vázquez perdió el control del camión de pasaje, continuó su camino, pero al ver que se proyectaba sobre dos mujeres que estaban paradas sobre la banqueta se aferró al volante y logró maniobrar hacia la izquierda, de lo contrario hubiera prensado a las damas contra el muro.

Sin embargo, al doblar colisionó a un Chevrolet Spark, placas YZF-963-B, que transitaba de Norte a Sur sobre la calle 15, cuyo conductor al ver que el autobús pasaba por encima del Attitude detuvo la marcha.

El autobús continuó avanzando y se subió a la isleta que divide los carriles de circulación, en donde se encontraba estacionado un auto de color blanco, pero el chófer logró esquivarlo; finalmente el camión quedó detenido, montado sobre la acera.

Cabe señalar que en el autobús viajan como pasajeros 15 personas y alguien llamó al 911, para informar del accidente; poco después llegó la patrulla 6222 de la Secretaría de Seguridad Pública, así como un moto-patrullero de la misma corporación y en seguida la ambulancia Y-18, al mando del paramédico Leonardo Pech Cauich.

Los Técnicos en Urgencias Médicas valoraron a los pasajeros y algunos resultaron con golpes contusos, pero no requirieron ser trasladados a una clínica.

Los vehículos estaban asegurados y aparentemente el problema de tránsito se resolvería en el lugar del hecho: algunos pasajeros esperaban que les entregaran un pase para acudir a un médico particular.