CIUDAD DE MÉXICO, miércoles 26/09/18.- Fernanda Moreno, la joven que ahora está en “boca de todos” por ser una supuesta “escort” que dos diputados querían “zumbarse”,  salió de inmediato a defenderse afirmando que sólo es una estudiante y modelo, sin embargo sus exuberantes fotos dejan mucho que pensar. 

En las redes sociales de Fernanda se pueden apreciar todo tipo de imágenes suyas, la mayoría en bikini y con poses muy sensuales y provocativas para los hombres, presumiendo además sus diversos tatuajes, hasta los que tiene cerca de su zona pélvica.

La foto que mandó el senador panista a sus amigos llegó hasta Moreno, quien -lejos de quedarse callada ante tanta exposición- manifestó sus sensaciones. Le reclamó al senador el uso de su imagen y de una foto que se tomó “hace tres días en el carro de mi mamá con ella al lado”, y aclaró que es estudiante y modelo.

No soy escort, no sé por qué llegaron esas fotos al teléfono de este señor. No sé si alguien está usando mis fotos para causar algún daño. Tengan mucho cuidado. No crean todo lo que ven”, manifestó.

Tengo novio, familia y estudio en la universidad. Creí que era una broma. Y no, no es broma”, agregó.

También advirtió que, como consecuencia de este episodio, recibió mensajes denigrantes de personas que le preguntan: “¿Cuánto cobras por zarandearte?”.

Tener redes sociales y subir fotos puede ser contraproducente hoy día, ya que nadie es dueño “real” de las fotos una vez subidas al Facebook o Instagram.

En Yucatán también hay casos de mujeres en especial las jóvenes de 22 a 28 años de otros estados que agarran como trabajo el ser “escort” para poder terminar sus estudios o bien como simple “hobbie”, ya que lo que ganan por un acto sexual es de $1500 a $2,000 y hasta $5000 si son “trios”.

Todas ellas son manejadas por sus “padrotes” o “madrotas” como común mente se les llama y son las que manejan su dinero y la cartera de clientes, sin embargo algunas veces acceden a dar su número telefónico si es un “buen pez”.

Los mejores clientes son los políticos, ya que en sus fiestas privadas pagan por la compañía y luego muchas veces por tener sexo con ellos, aparte de convivir y tomarse bebidas alcohólicas.

Sin embargo también a habido casos de  sujetos que roban las fotos de perfil de jóvenes para después subirlas a diversas páginas donde ofrecen los servicios sexuales de ellas y hasta con un número telefónico desconocido, lo que en sí pone el peligro su identidad, ya que la mayoría de las familias de estas jóvenes no saben a que se dedican realmente, afirma una entrevistada.

Mientras son “peras o manzanas”, las sexys y sensuales fotos de Fernanda Morena seguirán dando de que hablar y a lo que dirán la mayoría al ver sus “selfies”, preferirá guardar su reputación, pues el trabajo es “bajo el agua” sin que su familia lo sepa.