MÉRIDA, Yucatán, martes 14/11/18.- Como si el cielo llorara de dolor, en medio de una pertinaz llovizna fue enterrado Manuel Felipe Nery Blanco Méndez, quien fue baleado ayer frente al complejo de seguridad del estado, por un hombre que fingió el secuestro de un familiar en el vecino estado de Quintana Roo.

Antes, en la mañana, el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Luis Felipe Saidén Ojeda, negó rotundamente que el homicidio del agente policiaco estuviera relacionado con el crimen organizado o las mantas que aparecieron la mañana del lunes en Villahermosa, Tabasco.

Como publicamos, ayer en la mañana Ángel González Cob, acompañado de su esposa Nidia Pérez Euán,  asesinó al policía de la Policía Estatal Investigadora (PEI), luego que lo llevaban a la fiscalía, debido a que pidió ayuda policiaca.

La familia del occiso pidió respeto a su dolor, de modo que los representantes de los medios de comunicación no pudieron estar presentes en el sepelio, realizado en el cementerio de Xoclán, ubicado al poniente de Mérida, y solo pudieron presenciar la llegada del ataúd de Blanco Méndez.

En la ceremonia luctuosa estuvo la banda de guerra de la corporación de seguridad y de decenas de uniformados de la SSP, encabezados por Saidén Ojeda, quienes realizaron varios disparos de salva al aire en recuerdo de su colega fallecido.