MÉRIDA, Yucatán, jueves 29/11/18.- En una jugarreta más, de derrotados “ardidos”, el PRI utiliza a sus diputados para tratar de elevar las participaciones a los municipios, en detrimento del desarrollo del estado.

El diputado por azares del destino, Felipe Cervera Hernández, propuso aumentar en un 23% las participaciones de los municipios, lo que es un oportunismo político, ya que sólo quiere obstaculizar los planes del nuevo gobierno estatal para equipar los hospitales y en general mejorar todo el sistema de salud con médicos las 24 horas, traslados médicos y medicinas disponibles para quienes así lo necesitan, entre otros.

Estas normas se aprueban con mayoría simple, de modo que el PRI sólo necesita a tres diputados, pues el tricolor tiene 10, para modificarlas.

“Están confiados en que con ‘cañonazos’ de dinero pueden comprar a tres diputados para cambiar la ley y fregar al gobierno estatal, pero pueden violar preceptos federales y con un amparo se acabaría con esta propuesta”, indicó al respecto un panista.

Desde un principio, los priistas intentaron ponerle piedras al gobierno de Mauricio Vila Dosal, cuando los rectores y directores de universidades y colegios se negaron a dejar sus puestos, en lo que fue una ridícula demostración de inmadurez política.

El martes, en la sesión del pleno el PRI propuso reformas al artículo 5 de la Ley de Coordinación Fiscal que aumentarán las aportaciones a los municipios a un 23% de los recursos que perciba el Estado.

Ya no buscan de donde mantener a sus amigos y compadres, de modo que quieren hacerlo como una venganza contra el PAN ante la dolorosa derrota que le asestaron al PRI en el estado y después de perder la presidencia de la República, el tricolor busca la manera de colocar a sus estructuras y nóminas políticas en municipios para continuar sobreviviendo a costa del erario.

Este planteamiento es irrazonable, ya que no sólo no se considera aumento para el presupuesto de Yucatán, sino que las participaciones federales podrían disminuir, lo que causaría, en términos reales, mil 300 millones de pesos menos en el presupuesto.

Además, están los miles de millones que dejó de faltante la administración de Rolando Zapata Bello.

Son varios los panistas que afirman que, detrás de esta iniciativa, existe un móvil político para obstaculizar los planes del nuevo gobierno estatal, como mejorar el sistema de salud, capacitar y equipar a elementos policíacos y reforzar la lucha contra la violencia hacia la mujer, por citar algunos casos específicos.