CIUDAD DE MÉXICO, domingo 02/12/18.- Las risitas constantes de un bebé eran en realidad signos de un tumor cerebral raro. Los padres de un bebé aparentemente feliz que se “rió” durante 17 horas al día se sorprendieron al descubrir que en realidad tenía un tumor.

“La gente nos decía: ‘¿No es un chico feliz?’, Pero su risa no fue una risa, era otra cosa”.

Cuando el pequeño Jack Young, de Winscombe, North Somerset, comenzó a reírse dos semanas después de nacer, sus padres, Gemma y Ed, pensaron que era un bebé inusualmente alegre.

Pero resultó que las incesantes risitas eran en realidad episodios de “ataques de risa”, causados por un hamartoma hipotalámico, un tumor cerebral benigno.

No hubo descanso, el sonido de risa fue constante y durante mucho tiempo no teníamos ni idea de por qué, dijo Gemma, de 32 años.

Después de dos años de arrebatos, que comenzaron desde el amanecer hasta el atardecer, Jack tuvo una operación de 10 horas para eliminar el crecimiento. Y así, los extraños ataques cesaron. Según lo públicó The Sun.

AGENCIAS.-