MÉRIDA, Yucatán, domingo 21/10/18.- Luego del tremendo susto que se llevó, la historia de Josué Bote Caamal, a quien una estudiante de la Unimayab le arrojó ácido en varias partes del cuerpo, tuvo un “happy end”, al menos en el rubro monetario.

A este joven, quien es vocal secretario de la junta distrital número cinco del INE, con sede en Ticul, la intrépida y malvada joven, de origen colombiano, pero avencindada en Puebla, de donde vino a estudiar a la Unimayab, le pagó los gastos médicos de las curaciones.

En octubre publicamos que un joven vivió una noche de terror, en una fiesta en el norte de Mérida, ya que en un momento de descuido una mujer que fue a la reunión le arrojó ácido en el rostro y en los genitales.

El funcionario del INE responsabilizó de este hecho a Daniela Narváez Guzmán, estudiante de la Universidad del Mayab y originaria de Puebla, quien nunca fue detenida, aunque las partes involucradas llegaron a un acuerdo, para la reparación del daño.

Lo que se ignora es si el INE cubrió los gastos médicos de Josué, ya que cuando se “arregló” con la muchacha ya estaba sano y dado de alta del hospital privado al que lo llevaron.