MÉRIDA, Yucatán, jueves 27/12/18.- “Por mujeres como tú, hay hombres como yoooooo”… Más costoso y tardado fue llevarlo preso que su mujer lo perdonara de la madriza que le acomodó, para que queda libre, para que Rafael Santos Sansores de le dé la siguiente golpiza.

Más tardó y le costó a todo el aparato de justicia en llevar a proceso por los delitos de violencia familiar equiparada, lesiones (2) y daño en propiedad ajena al violento Rafael Santos, que en que lo perdonó su mujer, para que salga del penal para pasar las fiestas de fin de año con él, sin importarle lo que le ocurra a ella y a su familia.

Santos Sansores golpeó a su mujer e hija y les ocasionó lesiones que tardan menos de 15 días en sanar, y de paso hasta dañó el celular de su suegra que pretendía llamar a la policía.

La señora Nilda Gurubel Pérez fue a otorgarle el perdón a su pareja y le dijo al juez de control Luis Edwin Mugarte Guerrero que no tenía nada qué reclamar y deseaba que lo dejaran en libertad. Este juez le había impuesto al sujeto la medida cautelar de prisión preventiva durante dos meses. En cuanto al daño en propiedad ajena fue querellado por la suegra, la señora Judith Pérez Aguilar.

Sin embargo, a pesar de la sumisión y debilidad de la mujer, el juez decidió ponerle condiciones a este agresivo alcohólico y estableció que la Procuraduría de la Defensa del Menor y de la Familia (Prodemefa) haga un estudio al núcleo familiar, por los constantes y reiterados episodios de violencia, en los que los menores podrían ser víctimas de hechos delictuosos.

Incluso le ordenó al sujeto que se someta a un tratamiento psicológico, debido a la agresividad que tiene y a su manera descontrolada de beber.

El 22 de diciembre, en la  casa en la que habita la pareja, ubicada en el fraccionamiento “Serapio Rendón” celebraban el cumpleaños de la menor, cuando llegó Santos Sansores, en estado de ebriedad, y al ver que estaban sus cuñadas y su suegra, decidió embriagarse más.

Pasadas las horas, quiso seguir libando, pero su mujer le pidió que dejara de hacerlo, de modo que se fue a la terraza.

Sin embargo, alcanzó a escuchar cuando su suegra y mujer hablaban de él, cosa que no le agradó y pretendió golpear a la mamá de su pareja, pero la niña trató de defender a su abuela y, al caer al piso, recibió un pisotón de su padre en una mano.

Por su parte, la suegra pretendió solicitar auxilio policiaco, pero recibió tremendo empujón y el tipo le arrebató su celular el sujeto, el cual tiró contra la pared y lesionó en la frente a su hijo. Después empujó a su mujer, que cayó sobre unos cristales rotos.

Las agredidas fueron a la calle y pidieron ayuda a la Policía.