CIUDAD DE MÉXICO, domingo 03/02/19.- Un nuevo estudio realizado por la Escuela de Salud Pública y Nutrición Clínica de la Universidad de Finlandia Oriental, divulgado en la publicación académica American Journal of Clinical Nutrition, es concluyente: ingerir un huevo por día hace bien, ya que contribuye a reducir en más de un tercio el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

¿Y que hay de esas yemas deliciosamente cargadas de colesterol? ¿Y la amenaza de enfermedad arterial coronaria? ¿Se confirma incluso que la ingesta diaria de un huevo, de preferencia al desayuno, disminuye los índices de azúcar en la sangre? La Asociación Americana de la Diabetes (ADA) admite que sí, porque es rico en proteínas sacian y tardan en ser digeridas, impidiendo a los azúcares alcanzar niveles peligrosos para un diabético.

Es más: los huevos contienen biotina (o vitamina B7), que ayuda a convertir lo que comemos en energía y compensar el hecho de que el páncreas de los diabéticos tipo 2 no produce suficiente insulina para controlar las cantidades de glucosa en el torrente sanguíneo. Todo esto es buen motivo para que la ADA indique los huevos como una de las fuentes proteínicas más recomendables, aunque el estudio finlandés establezca el límite ideal en cuatro por semana.

“Nuestros resultados sugieren que no debemos enfocarnos sólo en la grasa, sino en los alimentos que ingerimos como un todo”, revela al portal científico Science Daily la investigadora Stefania Noerman, especialista en nutrición clínica y la principal autora de la investigación, según recoge el periódico lisboeta Diário de Notícias.

Después de examinar los hábitos alimenticios de 2.332 hombres entre los 42 y los 60 años, el equipo descubrió que aquellos que comían más huevos por semana presentaban una probabilidad un 37 por ciento menor de enfermar de diabetes, en comparación con los encuestados que se limitaban a un ” huevo semanal. Esto, subraya, sin nunca exceder los cuatro huevos aconsejados. Pasarse de los límites no sólo no trae ventajas, sino que potencia el riesgo de problemas cardíacos en los diabéticos.

Según los investigadores, la relación se mantuvo consistente aun teniendo en cuenta factores como la práctica de actividad física, consumo de fruta y vegetales, índice de masa corporal de los individuos y si fumaban. Al parecer, las muestras de sangre de quienes seguían una dieta con huevo incluían ciertas moléculas lipídicas que contribuían positivamente al perfil metabólico sanguíneo en hombres libres de la diabetes tipo 2.

“Aunque es prematuro establecer una relación causal al 100 por ciento, ahora tenemos mejor idea de cómo los compuestos del huevo desempeñan un papel determinante en posponer la incidencia de la enfermedad”, sostiene Noerman, subrayando que los beneficios incluyen atenuación de los síntomas de la enfermedad que ya es diabético en el presente.

“Es cierto que muchos alimentos contienen componentes que son perjudiciales o ventajosos para la salud en sí mismos. Sin embargo, lo más importante, en cada uno de los casos, es el balance global”, añade.

Además de insistir en no pasarse de las cantidades recomendadas, los expertos recomiendan que se cocinen con poca o ninguna grasa, preferentemente hervidos o escalfados.