MÉRIDA, Yucatán, viernes 15/02/19.- El presidente de la Alianza de Cantineros de Yucatán y dueño de la famosa “La Casita de Paja”  Edmundo Echeverría Urcelay, falleció en días pasados en Mérida a consecuencia de las complicaciones de la diabetes, enfermedad que lo mantenía casi ciego y en silla de ruedas desde hacía varios años.

El era propietario de la tradicional cantina “La Casita de Paja”, que en los últimos años se puso de moda entre estudiantes y jóvenes y de la comunidad LGBT.

Durante los últimos 30 años fue presidente de los cantineros y siempre estuvo rodeado de polémica porque se vio involucrado en asuntos polémicos, pues su carácter explosivo lo metió en muchos problemas, incluso fue denunciado varías veces, acusándosele en una ocasión de disparar a un taller de motocicletas ubicado en la calle 61, en la colonia Esperanza.

En septiembre de 2016 el bar fue clausurado  por la Secretaría de Salud, según por irregularidades detectadas ante quejas vecinales.

El ‘boom’ fue tal que los dueños han adquirido un par de predios contiguos para ampliar el negocio.

Tiene como peculiaridad que al área donde concurren mujeres jóvenes no se permite la entrada de ‘viejos’ o varones solos.

También es famosa por sus ‘chivos’, una mega cerveza servida en envase especial.

En el círculo cantinero era bastante apreciado y famoso por sus bromas pesadas, algunas de las cuales se las hacía a su propia familia.

FORMAL PRISIÓN