MÉRIDA, Yucatán, jueves 21/03/19.– Con tan sólo 21 años de edad, Tomás H. H, prácticamente echó a perder su vida, luego de ser detenido por violar a su vecinita de a penas 13 años, en el fraccionamiento Santa Cruz Palomeque.

El joven Tomás sacó el “depredador sexual” que lleva dentro y le bastó unos cuantos minutos para abusar y violar a una menor de edad, en el fraccionamiento Santa Cruz Palomeque, a unas cuadras del Periférico.

El 17 de marzo, a las 21:00 horas, la señora N. J. R. Y. llegó a su domicilio ubicado en la calle 187 del citado fraccionamiento, luego de una jornada laboral, y le pidió a sus dos hijas, una de 10 años y la otra de 13, que le fueran a comprar un refresco de cola para que cenara.

Las menores agarraron el dinero y se encaminaron hacia la tienda, que se encuentra a varias cuadras de distancia, pasando un parque, pero al regresar fueron interceptados por el ahora imputado, quien jaló del brazo a una de las menores y le dijo a la otra que se fuera o le iba a partir la madre.

La violación ocurrió cerca del parque, en unas casas en construcción, a unos cuantos metros del Anillo Periférico, entre la calle 106 entre 187-E.

Asustada, la niña de 10 años llegó hasta su casa , y le relató lo ocurrido a su madre, quien dio aviso al número de emergencia 911 y pocos minutos después hicieron acto de presencia elementos de la Secretaría de Seguridad Pública.

Sin embargo, no se tuvo la necesidad de implementarse un operativo de localización y búsqueda, ya que la víctima llegó en esos instantes y señaló a su agresor, quien vive en la misma calle.

El Juez Segundo de Control del Centro de Justicia Oral de Mérida, Luis Edwin Mugarte Guerrero, declaró legal la detención de Tomás H. H., al ser señalado por la ovencita como la persona que abusó sexualmente de ella.

Al ser detenido y consignado se le formularon cargos por violación equiparada (2) y como medida cautelar se le impuso la prisión preventiva de manera oficiosa, la sanción penal que enfrenta el acusado va de los 8 años a los 15 años de prisión.