MÉRIDA.- Después de poco más de siete horas de la teleaudiencia, ayer jueves en la noche el juez Luis Edwín Mugarte Guerrero imputó a proceso al tabasqueño Martín Alberto Medina Sonda, acusado de ser el coautor material directo del crimen de su ex esposa Emma Gabriela Molina Canto y se le busca juzgar por el delito de feminicidio.

Los fiscales Jesús Eddiel Zapata Solís y José Manuel Pedro Evia Chávez, adscritos al Juzgado Segundo de Control, le formularon cargos por feminicidio, que es sancionado con hasta 50 años de prisión, y le dijeron que, probablemente él tenía la infructuosa ilusión de recuperar una relación sentimental con su ex esposa y al no conseguirla para continuar manteniéndola sometida, planeó su muerte y contrató a gente para que la mate.

“Usted es probablemente la persona señalada como coautor material directo del asesinato de su ex esposa Emma Gabriela, a quien se dio muerte a puñaladas en casa de la ahora difunta, del fraccionamiento San Luis, acción por la cual ya hay tres personas implicadas en el crimen vinculadas a proceso penal#, le dijo uno de los fiscales.

El acusado se reservó el derecho de rendir declaración y pidió al juez que la audiencia sea privada y la prensa no estuviera presente, situación a la que el juzgador no accedió privilegiando el derecho de informar y ser informado y que la sociedad esté enterada de lo que acontece en las audiencias que son públicas.

El defensor de Tabasco solicitó la duplicidad del término constitucional, para e resolver sobre la situación jurídica de Medina Sonda; el juez Mugarte Guerrero programó para el próximo lunes 25 de abril, a partir de las 11 de la mañana, la continuación de la audiencia de vinculación a proceso.

En este asesinato artero están involucrados varios, tres de los cuales ya están detenidos, dos jóvenes tabasqueños, Óscar Miguel López Tobilla y Jonathan Mézquita Ávalos, quienes mataron a Emma Gabriela, y un chilango César Rogelio Reyes Barrueta, quien confesó todo ante el juez.

Ayer jueves, después de más de siete horas, se ordenó la prisión preventiva de manera oficiosa en contra del imputado, quien está preso en un penal del estado de Tabasco, luego de ser sentenciado por un delito de lavado de dinero a 12 años y 6 meses de prisión, que no ha quedado firme, ya que la defensa del preso se inconformó y metió el recurso de apelación.

La audiencia de ayer jueves, que resultó cansada, estaba programada para iniciar a la una de la tarde, pero comenzó una hora después; apenas se presentaban las partes que forman el proceso, cuando comenzó a fallar el sistema de audio y video utilizado como medio electrónico para la administración de justicia consistente en una videoconferencia.

Era la primera vez que se usaba este medio para imputar a proceso a una persona, pero el primer intento resultó fallido; el juez concedió un receso de cinco minutos para que se corrigiera el problema, al tiempo que ofreció disculpas al público asistente, a las partes que forman el proceso y a las autoridades de Villahermosa, Tabasco, que se encontraban en la otra sala, en la que estaban el acusado de feminicidio, acompañado de su abogado Luis Felipe H.G.

Hora y media después se reinició la audiencia, pero el asesor jurídico de los parientes de la víctima, Efraín Encalada Burgos, inició un debate al señalar que Edier Josué Pech Farfán, contratado por una señora familiar del imputado, estaba impedido por la ley para litigar, puesto que cuenta con una licencia de la Fiscalía General del Estado, donde trabaja como agente investigador del Ministerio Público.

De ahí se armó un debate y una cansada lectura de artículos legales para que a éste último se le autorizara asumir el cargo.

Esto generó un receso para que Pech Farfán consultara una modificación legal a la ley de Yucatán, en mayo del 2016, que le permitía trabajar como abogado defensor del imputado.

Después, Mugarte Guerrero disertó por más de media hora sobre si estaba facultado para asumir el cargo, a lo que finalmente accedió, no sin antes advertir al procesado y a su abogado tabasqueño, al igual que a Edier Josué, que eso podría tener alcances legales que les afectaría, pero aun así insistieron.

Luego, le concedieron que se comunique, vía telefónica, con su cliente, porque el miércoles fue contactado por un familiar de Medina Sonda, en Yucatán, para que asumiera su defensa desde este Estado.