MÉRIDA.- Luego de que aún bajo los efectos del alcohol atropelló y le aplastó la cabeza a un vendedor de cochinita, Stefanía Vanessa Puerto Piña sólo pagará $700 mil para “reparar” el daño, a la viuda del ahora occiso, la señora María Jesús Pech Poot.

La juez de control Elsy del Carmen Villanueva Segura aprobó el acuerdo reparatorio, pactado desde diciembre entre la esposa de la víctima y Puerto Piña, que, cuando llegara el cheque del banco, se decretara extinta la acción la acción penal y el sobreseimiento del asunto.

A la señora María Jesús no le quedó de otra que aceptar el trato por la muerte de su esposo César David Sansores Guillén, porque de lo contrario se hubiera prolongado más tiempo el proceso y no se garantizaría la reparación del daño.

El 15 de diciembre, a las 7:15horas, Stefanía, bajo los efectos del alcohol, después que un día antes estuviera en una alegre posada, transitaba de sur a norte sobre el carril izquierdo de la calle 68 entre 69 y 71 del centro, a bordo de una camioneta Honda, modelo CRV con placas YWM-251-13.

La mujer iba acompañada de su hija menor de edad, a la que llevaba a la escuela, y como estaba disminuida en sus reflejos, al guiar con falta de precaución, sin la diligencia necesaria y en estado de ebriedad, chocó por alcance el triciclo que era conducido por Sansores Guillén, quien la antecedía sobre ese mismo carril.

El vendedor de cochinita salió proyectado hacia el taxi con matrícula 1216YSB, que se encontraba estacionado. Después el triciclo continuó su proyección hacia el norte hasta su posición final.

Debido a que Stefanía Vanessa estaba disminuida de sus reflejos, no pudo controlar su auto y pasó las ruedas del vehículo sobre el cráneo de César David, causándole horrible muerte de manera instantánea.