MÉRIDA.- Las acciones y proyectos que emprendamos para proteger el medio ambiente y la vida silvestre que nos rodea, son también acciones para protegernos a nosotros mismos, pues todos somos parte de esta hermosa tierra, afirmó Víctor Caballero Durán en su visita al zoológico de la colonia Mulsay.

Invitado por los vecinos, el candidato priista a la alcaldía de Mérida pudo constatar las condiciones en que se encuentra el zoológico, uno de los tres con que cuenta la capital del estado y cuya administración depende del gobierno municipal.

Atrás quedaron los tiempos en que se distinguía como espacio de convivencia y recreación para las familias del poniente de Mérida, aseveraron vecinos del rumbo.

“Es un problema debe atenderse y resolverse, sobre todo por el tema de protección a los animales”, recalcó en el recorrido por las instalaciones del zoológico, el cual alberga todavía diversas especies de aves como pavos reales y guacamayas, y felinos, entre ellos tigrillos.

Doña María Chan Poot cuenta con nostalgia cómo las familias, los niños y los jóvenes venían a convivir y divertirse a este parque recreativo, donde había una biblioteca, una casa de espejos y el trenecito, pero se perdieron por la falta de mantenimiento.

En diciembre de 1982, el Parque Recreativo Mulsay fue inaugurado como una aportación al Programa de Integración Familiar. Sin embargo, hoy en día ese propósito se ha perdido por completo porque el lugar se encuentra en el olvido y los vecinos pidieron a Víctor Caballero su rescate.

Además de la escasez de animales, los cuales se encuentran en condiciones poco apropiadas, las instalaciones están oxidadas y con el pavimento roto, de tal forma que el zoológico ha quedado en el olvido para los meridanos, muchos incluso desconocen su existencia.

“Los que también pagan las consecuencias de estas deficiencias en los servicios de atención y mantenimiento son los propios vecinos, que antes tenían en el sitio actividades culturales, educativas, recreativas y servía de espacio para que la comunidad se reuniera”, indicó en una visita al parque.

Con más de 36 años como residente en la colonia Mulsay, don Armando Zapata Maya recordó como vio nacer este lugar como sitio de recreación y esparcimiento familiar y cómo a lo largo de varias administraciones municipales fue quedando en el abandono.

“Este espacio tenía un trenecito que, con orgullo lo digo, mi padre lo construyó; era el orgullo de nosotros y ahora lo tienen ahí tirado. Tenía áreas verdes con pasto que desafortunadamente la administración pasada lo retiró y cuando viene el aire se forma una polvadera que también perjudica a los animales”, manifestó.

“Urge rescatar este espacio y la colonia en general, porque nunca han hecho nada para mejorar instalaciones del parque y las inmediaciones”, comentó.