MÉRIDA, Yuc., martes 24/07/18.- Por presuntos errores en la detención de cuatro de los “huachicoleros” que ordeñaban un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) ubicado en la carretera Mérida-Progreso, el juez federal Christian Omar González Segovia decidió no vincular a proceso a los imputados, además de ordenar su libertad bajo reservas de ley, pues la Procuraduría General de la República (PGR) continúa con las indagatorias.

Como se recordará, la explosión ocurrió en las inmediaciones a la altura del kilómetro 24 de la citada la noche del miércoles pasado, después de que varias personas presuntamente ordeñaran un ducto de Pemex que transportaba turbosina, gasolina y diésel.

Tras lo ocurrido, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) al mando del comandante Luis Felipe Saidén Ojeda arribaron al lugar y combatieron el siniestro, además de arrestar a siete personas, de las cuales cuatro fueron puestas a disposición de la PGR y las restantes al hospital Agustin O’Horán con quemaduras severas. Cabe señalar que una de ellas, Alejandro Martínez Matos, de 35 años, perdió la vida el viernes pasado.

En la audiencia de vinculación a proceso celebrada el sábado, Christian González Segovia, Juez Segundo de Distrito decretó la no legal detención de los presuntos delincuentes, por lo que ordenó su liberación inmediata.

Fuentes al interior de la PGR que solicitaron el anonimato indicaron que la detención de los presuntos huachicoleros ocurrió pasadas las diez de la mñana del 18 del presente mes, sin embargo, fueron llevados a la PGR casi 12 horas más tarde, lo que pudo ser tomado en consideración por parte del juez González Segovia.

Asimismo, la defensa alegó violaciones a los derechos humanos por parte de los agentes de la SSP, situación que también fue valorada por el juzgador.

Cabe señalar que González Segovia ha estado involucrado en otras polémicas decisiones tales como la liberación de Roberto Nájera Gutiérrez alias “La Gallina”, presunto operador del crimen organizado, en enero de 2017, que semanas después fue arrestado por contar con una orden de arresto por el homicidio de dos mujeres.

En 2015 el mismo juzgador se vio envuelto en una polémica al “despenalizar” el uso de la mariguana en cantidades superiores a los cinco gramos, al decretar la libertad de una persona que portaba 17.5 gramos el enervante.