MÉRIDA, Yucatán, viernes 19/10/18.- Ayer jueves, poco antes de las dos de la tarde, un grupo de maestros encabezados por V.J. González, Carlos Campo Marín, Mirna Medina y Santiago Cortes solicitaron el apoyo de los diputados de MORENA, para el pago del estímulo K1.

Los docentes entregaron a los diputados la documentación que comprueba que más de 1,000 maestros fueron engañados por la SEGEY, bajo la administración de Víctor Caballero Durán en el sexenio de gobernador Rolando Zapata Bello.

Los docentes recalcaron que exigen a la SEGEY el pago del estímulo K1, y se vea reflejado en un aumento de entre $1,600 y $2,000 en su salario quincenal, tal como lo estipulaba una convocatoria emitida en marzo del 2017.

“De nada sirvió que te prepares, te dediques, te evalúes, salgas destacado o bueno, porque de todos modos no te iban a cumplir; a eso le tenían miedo los maestros a la reforma educativa” indico J. González.

Aunque la convocatoria fue emitida cuando la SEGEY estaba bajo la administración de Caballero Durán, los maestros ya han entablado una plática con la nueva titular Loreto Villanueva, quien les brindó un trato amable y les aseguró que trabajara con el departamento jurídico y autoridades para dar una respuesta a la situación.

En las próximas semanas los docentes interpondrán una denuncia por la vía legal a la falta de respuesta de la SEGEY y agotarán todos los recursos legales para que les cumplan con el pago del estímulo salarial K1.González dijo que tienen minutas firmadas por la administración del ex gobernador Rolando Zapata, en las quee aceptan que la convocatoria era legal y valida, y admiten que si les correspondía legalmente el pago y que por cuestión de tiempo el estímulo lo pagarían la administración entrante.

Víctor Caballero, en su cuenta de Facebook, dijo a través de un video que el pago del estímulo K1 si le correspondía a los maestros yucatecos, pero debido a que ya no se encuentra al frente de la SEGEY, ya no le corresponde esa responsabilidad.

La reforma educativa fue más bien una reforma laboral del gobierno federal, en la que funcionarios de varias dependencias de gobierno se acomodaron sueldos magistrales a familiares y amigos de hasta $200 mil pesos al mes.