MÉRIDA, Yucatán, miércoles 12/12/18.– En una pifia más del juez de control Rómulo Antonio Bonilla Castañeda ocasionó que el mininarco Carlos Manuel Candelero Pérez huyera de la justicia, pues lo dejó libre aunque el sujeto carecía de un domicilio, para localizarlo.

Bonilla Castañeda ha incurrido en este tipo anomalías varias veces y no es la primera vez que lo dejan mal los acusados, que ya no regresan para ser juzgados a la primera oportunidad que le dan.

Candelero Pérez enfrentaba el delito de contra la salud, por la venta de cocaína, en la presentación de “crack”, al igual que su coacusado Edwin David Mendoza Che, a quien se le difirió la audiencia intermedia, para el 26 de diciembre.

El 14 de septiembre, poco antes de las 17 horas, los arriba señalados estaban en la calle 69 entre 70 y 72 del Centro, y que Edwin le entregó a Carlos una bolsa con la leyenda “Mary Kay”, que en su interior contenía 35 bolsitas de plástico ziploc con “crack”.

Después de ser detenidos, a Mendoza Che le hallaron una bolsa con la leyenda “Tu Botana Fritos”, con casi 10 gramos de cocaína.