MÉRIDA, Yucatán, miércoles 19/12/18.– El secretario de Salud de Yucatán, Mauricio Sauri Vivas, informó que aún no tienen fecha para conocer detalles de los cambios que exigirá la federalización de los servicios de salud del estado.

“Estamos en pañales todavía”, dijo el funcionario, quien explicó en entrevista que desconoce los alcances de esta propuesta firmada por el presidente López Obrador y el gobernador Mauricio Vila el viernes pasado.

Vivas Sauri indicó que hasta ahora no saben cuándo serán llamados a la capital del país por el secretario de Salud federal para los cambios que se requerirán rumbo al traslado de unos 100 centros de salud y su personal a la competencia federal.

Dijo que cada estado realizará un procedimiento específico para dar paso al procedimiento de enajenación de las instalaciones y personal de los organismos de salud. Por ello, cada estado tendrá pláticas con la federación y de momento no hay un primer acercamiento para este proceso.

Sauri Vivas anticipó que cada estado “tropicalizará” el procedimiento para hacer el traspaso de entrega de estos organismos, pero reiteró no tener detalles de los alcances, propuestas, del número de trabajadores que se integrará a este proceso y monto presupuestal que se asignará para dicha operación.

Por otra parte, el funcionario explicó que en este momento la dependencia se encuentra cubriendo los pagos salariales extraordinarios asignados a los trabajadores federales de la dependencia, aguinaldos y cobertura de recursos, bono sexenal asignado que se retrasó para entregarlo a los empleados.

Informó que el bono sexenal autorizado por el gobierno federal “llegó” el lunes y a partir de ayer se está entregando a los trabajadores que reciben este derecho, por lo que afirmó que por el momento no hay deudas en el sector.

Puntualizó que en este momento los trabajadores están laborando normalmente y destacó que la dependencia a su cargo está completando las evaluaciones para la instalación de la cámara hiperbárica que se instalará en Progreso. Argumentó que no se han hecho pruebas, porque la unidad estuvo abandonada seis años.

También que se han hecho los estudios para el inicio de operaciones y su funcionamiento, mismo que, podrá terminarse en 2019.

“Los análisis y los dictámenes se entregarán al gobierno para de ahí delimitar los mecanismos de operación, ya que la cámara no tiene conexiones y mangueras para su funcionamiento”, finalizó.