MÉRIDA, Yucatán, martes 05/01/19.- Pasaron cuatro años para llevar al conocido abogado Juvencio Valdez Franco “frente a la justica”, por agredir a su esposa y al hijo de ambos, pero antes que un gallo cantara tres veces la juez de control Ileana Georgina Domínguez Zapata ya lo había dejado libre.

Esta juez sólo vinculó a este sujeto por el delito de violencia familiar (2), que denunció la señora Irma Teresa Canul Briceño, por las agresiones a su persona y a su hijo.

A Valdez Franco se le impuso las medidas cautelares de depositar una garantía económica de 5 mil pesos; que sea visitado por personal del Centro Estatal de Medidas Cautelares al domicilio en el que dice habitar, a fin de verificar si en ese lugar reside (cosa que no se debió de aceptar, por el simple hecho que puede evadirse); firmar, y no acercarse a la denunciante, por todo el tiempo que dure el proceso. El cierre de investigación complementaria sea en dos meses.

De acuerdo con la denuncia, los hechos se dieron el 20 de abril del 2015, a las 16 horas, cuando el sujeto llegó de manera alterada al domicilio ubicado en la calle 67-H entre 116 y 118 de la colonia Nueva Mulsay, donde habita su ex esposa y sus hijos menores.

Acto seguido, llamó a gritos a su hijo menor y al ver a la denunciante la tomó del cabello y la arrastró por la sala, le dio un manotazo en la boca, de modo que la lesionó en el labio, por lo que la mujer se defendió.

El menor, quien estaba también en el lugar, fue aventado contra la mesa del comedor y el sujetó lo golpeó con el puño en la boca del estómago. Aun así, el niño, al ver que su madre corría peligro, pidió auxilio.

El agresor salió por la parte de la cocina y la denunciante fue detrás de él, para tratar de alcanzarlo, con la ayuda de vecinos.

Este sujeto se escondió en una casa ubicada a dos cuadras de distancia de donde agredió a su mujer; los policías lo esperaron y al salir lo detuvieron, pero más tardaron en apresarlo que en que lo dejaron libre.