MÉRIDA, Yucatán, lunes 11/03/19.- Los líos de Michelle Fridman Hirsch, parecen no tener fin y ya han dado cuenta de ello en la capital del país, donde dijeron que está metida en una tormenta de la que sólo saldrá haciendo política o de lo contrario, su paso por el servicio público será tan efímero como una “bomba” yucateca

“Malquerida” gracias a su incontinencia verbal, la secretaria estatal de Turismo vive en carne propia el famoso refrán “crea fama y acuéstate a dormir”: Este fin de semana fue vapuleada porque Víctor Cervera Hernández, que de su papá sólo tiene el nombre y el apellido, publicó en sus redes sociales una foto en la que la venida del altiplano viaja en primera clase en un vuelo.

De inmediato se relacionó esa foto con la feria turística de Berlín, de la que el viernes 8 mandó un boletín triunfalista, y de inmediato fue sometida a latigazos, coronada con una corona de espinas y finalmente crucificada, por gastar mucho a cargo del erario yucateco, adelantándose a la pasión de Cristo, porque todavía estamos iniciando la Cuaresma.

De acuerdo con información recabada, esa foto tiene por lo menos un mes o un poco más, es decir no es del viaje a Berlín, del que se duda que Michelle haya ido, porque no aparece en las fotos, cuando es ampliamente conocido que ella tiene un afán desmedido en figurar.

Es decir, Michelle viajó en primera clase siendo secretaria de Turismo, pero no este fin de semana como insinuó Victorcito, quien critica la “austeridad vilista”, pero nunca criticó los bienes de su papá obtenidos a lo largo de su trayecoria política, de los cuales él goza ampliamente, así como tampoco criticó al gobierno de Ivonne Ortega Pacheco, del que fue funcionario, por el despilfarro de la dzemuleña, ampliamente conocido y difundido.

Michelle tiene el gran reto de recuperar su imagen, lograr que le reconozcan su buen trabajo, si es que lo tiene, y de demostrar que hace las cosas bien, aunque en casi seis meses sólo ha hecho una labor mediática, de aires triunfalistas e incluso le dieron en España un premio por un programa que era un plan y no sabemos si será acertado y dará resultados.

Los boletines de Michelle son el reflejo de su soberbia y arrogancia: Todos son triunfalista, de modo que a todos los lugares a donde ha ido y llevado a sus amigos con costo para nuestros bolsillos dice que Yucatán triunfa, pero las cuentas de los turisteros no reflejan esta maravilla en la que esta mujer ha convertido a Yucatán, aun sin haber borrado del mapa a Progreso.

Luego comentaremos el artículo de Carlos Velázquez, en “Dinero en Imagen”, en el que narra las desventuras de Michelle en Yucatán.