MÉRIDA, Yucatán, domingo 21/04/19.- Un turista que iba rumbo a Celestún, se detuvo en el retén que está en Chunchucmil y juró asustado que había visto un vehículo volcado, lo que causó la movilización de policías, paramédicos y hasta bomberos estatales

Según la información recabada, la madrugada de hoy domingo, en la carretera que va hacia Celestún, justo de la “curva del diablo”, un joven se detuvo porque escuchó unos gritos de auxilio poco antes de las 3 am, pero por estar oscuro y en una peligrosa curva mejor continuó su camino para reportarlo a las autoridades policiacas.

A los pocos segundos, otra llamada de auxilio se escuchó en la comandancia del puerto y se reportaba que a la altura del kilómetro 57 se encontraba un auto color blanco volcado.

Al llegar los cuerpos de emergencia, alumbraron la zona pero no vieron rastros de alguna salida de auto en este tramo.

La falsa alarma hizo que regresen a sus bases los tragahumos del carropipa 794 y paramédicos de la 21-G, de Kinchil y Hunucmá, respectivamente.

Como se sabe, la curva de la muerte (Bella Flor) y un kilómetro y medio más adelante (la del diablo) han sido escenario de trágicos percances.