MÉRIDA Yucatán, sábado 01/06/19.- A Sisely Burgos Cano, quien había sido nombrada delegada de la Profeco, poco le duró el gusto en el cargo, pues desde el día 2 de mayo le avisaron por el coordinador general de delegaciones de esa Procuraduría, que estaba dada de baja.

Y en la quincena siguiente le cancelaron su pago y la justificación que se dio es por el memorando que emitió la SHCP el 29 de abril, pero eso fue más bien el pretexto, porque en realidad ya se había pensado darle de baja por el escándalo en que se metió al encerrar a unos empleados, además de numerosas quejas, pero sobre todo por su falta de competencia para el cargo.

Ha sido tanta su falta de capacidad, que siempre ha metido a gente ajena a la dependencia para que la asesoren. El último de ellos, que operaba prácticamente como el poder tras el trono, es Nicolás Medina, conocido como “Nico”, un ex líder sindical de los telefonistas, ex perredista que formó parte activa de la corriente de los “Chuchos”, o sea Nueva Izquierda y ahora militante de Morena, que forma parte del grupo llamado “Comité de Base Central”, al cual pertenece el secretario general del comité estatal Eleonai Contreras Soto.

Según los empleados de la Profeco, Nico Medina diario iba a la Profeco y le daba instrucciones a Sisely y ella le consultaba todo y hacía todo lo que aquél le diga.

Esto causaba mucha confusión y molestia entre los empleados, porque un empleado totalmente ajeno a la dependencia es el que tomaba decisiones sobre la conducción de la misma y eso es totalmente ilegal.

Lo mismo pasó con Reinaldo Mancebo (ex consul cubano) y quien fue el que puso los candados cuando encerraron a los empleados. Éste, por cierto, también forma parte del comité de base central.

Lo que es un hecho es que Sisely Burgos ya no es oficialmente la delegada de Profeco y esto ha causado mucha alegría entre todos los trabajadores de la dependencia, por el trato prepotente que siempre le caracterizó y que siempre le hacía estar exclamando que a ella la había nombrado directamente el presidente de la república.