TEXAS, jueves 11/07/19.- Freddie Mack, de 57 años de edad y originario del condado Johnson, en Texas, murió devorado por sus propios perros, confirmaron autoridades locales. Había sido reportado como desaparecido hace dos meses.

Familiares de la víctima informaron que él siempre estaba en contacto con ellos y que al menos dos veces al mes pedía transporte a la tienda. Sin embargo al no saber de él por días, acudieron a su casa, donde al intentar registrarla encontraron 18 perros muy agresivos.

Autoridades locales también acudieron a la casa para registrarla y después de mucho trabajo lograron distraer a los perros para entrar, pero no pudieron encontrar a Mack.

Días después regresaron a la vivienda para buscar una vez más, y esta vez encontraron un pequeño trozo de hueso, mismo al que le practicaron pruebas en el consultorio del médico forense, el cual notificó que los fragmentos óseos encontrados en la propiedad de Mack eran de él.

De acuerdo con la publicación de El Diario NY, 13 de los 16 perros que fueron encontrados en la casa tuvieron que ser sacrificados debido a su comportamiento salvaje. Originalmente se encontraron 18 canes en la propiedad, pero dos fueron asesinados por la misma manada.

AGENCIAS