MÉRIDA, Yucatán, lunes 29/07/19.- En una prueba más de que los inspectores del transporte sólo hacen “bisnes”, un chófer de minis 2000 de la ruta Chuburná manejaba con audífonos puestos y hablando por celular, de modo que no vio al tren y lo chocaron.

De nada sirvieron los gritos de los pasajeros, pues el chófer no escuchaba y distraído hablaba campantemente, de modo que se metió al paso del tren y lo chocaron.

El  joven Rubén Cel  tranquilamente salió de su casa para irse a su trabajo y abordó su autobús de la ruta Chuburná 21, número económico 2229, pero al llegar circuito con 60, donde están las rieles del tren, en la colonia Buenavista al camión de pasaje en el que viajaba lo chocó el caballo de acero.

“El camionero tenía puestos sus audífonos y distraído hablaba por celular y por más que varios pasajeros le dijeron cuidado con el tren el chófer en vez de parar aceleró más tratando de ganarle y ocasionó que lo chocaran”, indicó el pasajero.

Debido al fuerte golpe del choque, los pocos pasajeros que viajaban en el autobús salieron disparados.

En una actitud que demuestra más su tremenda irresponsabilidad, luego del choque el camionero bajó del autobús y les dijo a los pasajeros que se fueran, para tratar de evadir su responsabilidad.