CIUDAD DE MÉXICO, martes 13/08/19.– La defensa de Rosario Robles Berlanga, vinculada a proceso por ejercicio indebido del servicio público y trasladada al Reclusorio Femenil de Santa Martha Acatitla, aseguró que se trata de una persecución política y tienen todos los recursos necesarios para demostrar la inocencia de la ex titular de Sedesol.

Luego de más de 12 horas de audiencia, Alejandro Olea, uno de los abogados de la exsecretaria de Desarrollo Social, dijo que Rosario Robles es una presa política y la FGR no tuvo la capacidad jurídica y moral para rebatir las pruebas presentadas.

ncontramos ante un Tribunal del Estado; los hechos, pruebas y leyes no fueron parte del debate y de la imputación de la defendida”.

“Estamos ante una violación grave de la presunción de inocencia de Rosario Robles y de una violación grave al debido proceso”, subrayó.

Aseguró que la extitular de Sedesol tiene los recursos a su alcance y los harán valer desde este momento.

El litigante señaló que empezarán a trabajar en combatir las dos resoluciones —la medida cautelar y la vinculación— porque “son ilegales y contrarias a Derecho y a los tratados internacionales de los que México forma parte”.

“Evidentemente no esperábamos esta resolución porque exhibimos y desahogamos todos los datos de prueba y de investigación que acreditan la inocencia de Rosario Robles”, expresó.

En declaraciones a medios, afirmó que la Fiscalía no pudo realizar manifestaciones jurídicas para rebatir la teoría de la defensa y un “juez de consigna” determinó una prisión preventiva justificada con fundamentos meramente subjetivos.

Julio Hernández Barros, otro abogado de la exfuncionaria, indicó que se encontraron con un Tribunal de Estado pues se violó el debido Derecho y la presunción de inocencia, porque aunque se entregaron pruebas, estas no fueron tomadas en cuenta por la FGR.

“Esta resolución fue un acto de crimen a la justicia, de asesinato a la ley, victimizaron a la Constitución, ella es inocente”, sostuvo.

Afirmó que el juez puso palabras en boca de su defendida y no lo que consta en el acta de entrega de Rosario Robles.

“Realmente estamos ante una persecución, ante una presa política que podríamos calificarla ya a ese grado”.

“Ella es un chivo expiatorio que quieren tanto el gobierno federal y otros personajes de la política pública, aquí estamos y seguiremos dando la cara”, puntualizó.

NOTIMEX