MÉRIDA, Yucatán, jueves 03/10/19.- Con más ira que cerebro, Rolando Guillermo V. A. golpeó a su mujer mientras esta tenía en brazos a la hija de ambos, de nueve meses de edad, y las arrojó del auto en el que  los tres iban, en la colonia “Melchor Ocampo” de Kanasín.

Este energúmeno fue vinculado por el delito de violencia familiar y la juez de control de Kanasín, Maritza Virginia Polanco Sabido, le otorgó a la víctima diversas medidas de protección, a las que de manera irrazonable y contra toda conducta educada y de gente civilizada se opuso la defensa, pero la juez accedió a la petición de la defensa de la mujer.

En la audiencia, la defensa del sujeto pretendió que se modifiquen las medidas cautelares que se le habían impuesto, ya que dijo que el brazalete electrónico que se le colocó al tipo le molestaban la piel, pero como no presentó algún certificado médico que respaldara su petición, no se accedió.

Las medidas cautelares impuestas al ahora procesado fueron firmar los primeros cinco días de cada mes; someterse a vigilancia; no salir del Estado sin autorización, y brazalete electrónico, por todo el tiempo que dure el proceso; la juez programó el cierre de la investigación complementaria en tres meses.

El lunes 23 de septiembre, a las 11 horas, el ahora procesado conducía un vehículo Spark sobre la calle 10-A con 31 diagonal de la colonia Melchor Ocampo, de Kanasín; estaba, acompañado de su esposa L.L.U.Ch., quien tenía en sus brazos a la hija de ambos, de 9 meses de edad.

En un momento dado empezaron a discutir y el sujeto empezó a golpear a la mujer en diversas partes del cuerpo, aprovechando que ésta no podía defenderse al tener abrazada a la niña.

Sin importarle lo anterior, este energúmeno abrió la puerta del copiloto y empujó a la mujer con la menor, de modo que ambas cayeron al pavimento y se lesionaron.